San Juan, 17 jun (EFE News) – El presidente de la Comisión de Transportación e Infraestructura de la Cámara de Representantes, José González, anunció la presentación ayer, martes, de un proyecto por el que se extiende 60 días adicionales todos los incentivos del pago acelerado de multas expedidas y así registradas a las tablillas y licencias de conducir, por concepto de infracciones incluyendo los intereses, recargos y penalidades.
Según explicó este miércoles el representante por el Distrito 14 de Arecibo y Hatillo, en un comunicado, «según fue reportado en los principales medios de comunicación, más de 270,000 personas se habían beneficiado del referido programa. Pero también sabemos, que luego de los temblores y debido a la pandemia, aún quedan muchas personas que no se han acogido a este beneficio, que termina el próximo viernes, 19 de junio de 2020».
«Al momento se han recaudado cerca de $14 millones a través de esta Ley. Estamos convencidos que las situaciones antes planteadas han impedido que los ciudadanos se beneficien del programa», agregó.
La pieza legislativa enmienda las Secciones 1, 3, 7 y 9 de la Ley 134-2019 para proveer el ante mencionado alivio.
«Ante la nueva realidad que vivimos en Puerto Rico, entendemos meritorio que se extienda el programa objeto de la Ley 134-2019 por unos 60 días adicionales a partir de que se reanuden las labores en las colecturías del Departamento de Hacienda y los Centros de Servicios al Conductor (CESCO) del Departamento de Transportación y Obras Públicas (DTOP). Es nuestra conclusión que la extensión del programa antes mencionado sería a beneficio de nuestros ciudadanos y del Gobierno de Puerto Rico», añadió González.
La Ley 134-2019, estableció un programa de incentivos para promover el pago acelerado de multas expedidas a las tablillas y licencias de conducir.
Ello se debe a que según la exposición de motivos de la citada disposición alrededor del cuarenta por ciento de los conductores en Puerto Rico, manejan de forma ilícita al no estar autorizados a hacerlo.
La referida situación se debía principalmente a que los conductores decidían no renovar la licencia de conducir al no poder pagar el alto monto de las multas acumuladas como consecuencia de infracciones de tránsito.
Esto provocaba a su vez, que la Administración de Compensaciones por Accidentes de Automóviles (ACAA), denegara la cubierta debido a que el conductor no poseía una licencia vigente al momento en que ocurrió el accidente.