El cantautor es una figura emblemática de la cultura puertorriqueña
San Juan, Puerto Rico – El cantautor Antonio Cabán Vale “El Topo” falleció durante el día de hoy, tenía 81 años, confirmó a WKAQ el cantante Roy Brown.
Otros compañeros músicos también confirmaron el deceso y expresaron sus condolencias a la familia.
“Topo merece estatuas y calles a su nombre. Un honor haberle conocido. Siempre amable, un talento que no tiene mucha comparación en estas coordenadas. Un abrazo a Adean Caban Butter y a Guanani Caban-Butter”, publicó el músico Luis Ahmed irizarry en su cuenta de Facebook.
Vale sufrió un accidente cerebro vascular en marzo de 2021, situación médica que lo dejó en condición delicada de salud y sin poder pisar los escenarios.
Nacido en Moca el 22 de noviembre de 1942, Antonio Cabán Vale, conocido artísticamente como “El Topo”, ha sido una figura emblemática de la cultura puertorriqueña. Su infancia en este humilde pueblo del área oeste de Puerto Rico despertó en él una profunda inclinación a la reflexión y la meditación. En 1961, se trasladó a Río Piedras para estudiar en la Universidad de Puerto Rico, donde comenzó a publicar sus poemas en la revista “Guajana”, ganándose el apodo de “El Topo”.
Tras obtener su Bachillerato en Artes y Ciencias Sociales en 1966, trabajó como maestro en la escuela pública. Sin embargo, su pasión por la poesía lo llevó a musicalizar sus versos en la década de 1970, fundando el grupo Taoné. Su estilo, caracterizado por la sencillez y profundidad de sus letras, se destacó con canciones como “Flor de amapola”, “Qué bonita luna”, “Los lirios del campo” y “Solina, Solina”. Su tema “Canción de los amantes” ha sido versionado innumerables veces, y su protesta social resonó con “Antonia” y “Canción del pueblo”.
Con una carrera prolífica, su danza “Verde luz” se ha consolidado como un himno nacional, al igual que “Lamento borincano” y “En mi Viejo San Juan”. En los años 90, lanzó producciones destacadas como “La patria va” y “Un metro de ternura”, con el tema “Amante corazón” bajo la dirección de Manuel Tejada y la supervisión de Juan Luis Guerra.
Además de su música, ha publicado dos libros de poesía: “Un lugar fuera del tiempo” y “Penúltima salida”, explorando la vida en su pueblo y la búsqueda de sentido en la confusión del mundo moderno. Su obra ha sido elogiada por figuras como Francisco Matos Paoli, quien destacó su capacidad para elevar la poesía a una “cima trascendente”.
En la actualidad, Antonio Cabán Vale sigue renovando la música nacional con un grupo de jóvenes músicos puertorriqueños. Su repertorio abarca géneros criollos como la décima, la plena, la bomba, el son, el bolero, y fusiones con ritmos del Caribe. Su legado continúa vivo, con su música y poesía siendo una voz constante de amor, tierra y cultura puertorriqueña. En 2001, se le dedicó la sexta edición de la Feria Internacional del Libro, y en 2004, lanzó su producción “Inmensamente”, reafirmando su lugar en la historia musical y literaria de Puerto Rico.