Por Jorge J. Muñiz Ortiz
Agencia EFE
San Juan, Puerto Rico – El pelotero puertorriqueño Eddie Rosario, de los Nacionales de Washington, asegura a EFE que se le ha hecho «un poco difícil» acoplarse a su rol como bateador designado en la ofensiva del equipo, limitando su tiempo en la defensa, pero que lucha por entrar a otra serie postemporada.
«Es otra faceta a la que tengo que acoplarme. Parece que no hay nada que hacer» al respecto, dijo Rosario en entrevista por videoconferencia sobre la decisión de su dirigente, Dave Martínez, y el resto de la gerencia de los Nacionales para que vuelva a los jardines y se destaque en ambas facetas del juego.
Según admitió Rosario, el año actual en las Grandes Ligas lo arrancó «lentísimo» en el aspecto ofensivo, pues se integró tarde a los campos de entrenamiento de los Nacionales, una situación «muy diferente» a la que estaba acostumbrado con las otras tres novenas que había estado.
«Se me hizo difícil caer en ‘timing’ (tiempo), caer en juego, con los ‘pitchers’ (lanzadores). Vine a calentar un mes después, pero trabajando. Ya lo tomo como un trabajo diario, un día nuevo todos los días sin pensar en lo que pasó», reflexionó el pelotero de 32 años y natural de Guayama.
Rosario fichó para un año con los Nacionales en marzo pasado, cuando también empezó a ser representado por Rimas Sports, una agencia de gestión de atletas con sede en Puerto Rico.
Busca «encontrarse» para destacar nuevamente
Hasta este lunes, Rosario bateaba para promedio de .186, con 7 jonrones y 26 carreras empujadas, números muy por debajo de los que acumuló con los otros tres equipos con los que ha jugado: Mellizos de Minnesota, Guardians de Cleveland y Bravos de Atlanta.
No obstante, ha tenido semanas destacadas esta temporada, como la del 6 al 11 de mayo, cuando fue nombrado Jugador de la Semana por tercera vez en su carrera.
«Estoy tratando de encontrarme. Es como un ‘feeling’ (sentimiento) de cuando estás bien y te pueden lanzar lo que sea y lo vas a batear. A veces hay molestias en el cuerpo que no te dejan hacer bien el ‘swing’, el ‘timing’ y no estás cómodo. Es un sube y baja, es encontrarme en la rutina», detalló.
Pero, además de sus respetados años ofensivos con los Indios, Guardians y Bravos, a Rosario también se le conoce por su buena gestión defensiva en el jardín izquierdo.
En la temporada de 2015 con los Mellizos, lideró a los guardabosques izquierdo de la Liga Americana con 15 asistencias, y es además el líder activo de esa posición en ese departamento con 51.
Espera con ansias volver al ‘Team Rubio’
Esa faceta defensiva Rosario la ha demostrado también representando al ‘Team Rubio’, mote del equipo de Puerto Rico en las pasadas dos ediciones del Clásico Mundial de Béisbol por teñirse el cabello de amarillo.
El pelotero espera con ansias jugar frente a su gente en la cita de 2026, cuando el estadio Hiram Bithorn, en San Juan, volverá a acoger la primera ronda del torneo, como hizo por última vez en 2013.
«Estoy contento con el pueblo. Hace falta. Ya es como una tradición que esa primera ronda sea en el Bithorn. Será una ocasión especial», dijo Rosario, quien está acompañado en ese equipo por otros grandesligas como Carlos Correa, Francisco Lindor, Javier Báez, Christian Vázquez y Heliot Ramos.
Rosario cuenta con una medalla de plata del Clásico Mundial de Béisbol 2017 y ostenta un anillo de campeonato de las Grandes Ligas, cuando en 2021 ganó el mismo con los Bravos de Atlanta, por lo que quisiera, al menos este año, adelantar a la serie de postemporada con los Nacionales.