San Juan, Puerto Rico (EFE) – El Movimiento Solidario Sindical, el cual representa a cientos de empleados de Pepsi Cola y Coca Cola, entre otras empresas privadas en Puerto Rico, pidió este miércoles al Gobierno que pruebe el salario mínimo de $10.50 la hora.
Con la aprobación de la Ley 47-2021 es que se haría oficial dicho aumento efectivo el 1 de julio próximo, según dijo en un comunicado de prensa José Rodríguez Vélez, representante del Movimiento Solidario Sindical.
«En estos momentos la Comisión Evaluadora del Salario Mínimo continúa silente sobre el aumento de salario mínimo que debería comenzar este próximo 1 de julio», lamentó Rodríguez.
Según el líder sindical, la clase obrera, que depende de un salario mínimo para cubrir las necesidades básicas, «no puede ser parte de revanchismos partidistas de parte del gobierno de turno al no brindar el aumento de salario mínimo que se merecen los trabajadores y trabajadoras que laboran en la empresa privada».
«El costo de vida ha aumentado drásticamente en los pasados años, y mientras el gobernador estaba en campaña, y aunque este decía que la economía estaba boyante, y ahora que cambió el panorama político luego de las primarias, vemos un silencio sobre el tema del salario mínimo», expresó.
Ante ello, sostuvo que «el gobierno saliente le tiene hacer justicia salarial al sector en la empresa privada que cobra el mínimo».
Rodríguez dijo además que recientemente solicitó una reunión con el titular del Trabajo, Gabriel Maldonado, para dialogar sobre el tema, pero la solicitud fue ignorada.
«Lo único que podemos pensar es que no le quieren dar cara a los defensores de la clase obrera, y se ampararán en recomendaciones patronales para castigar a los trabajadores que están desprovistos de un sindicato que les asegure aumentos», indicó.
Agregó que sería otra «traición» si el Gobierno rechaza aprobar dicho salario mínimo, al igual que hizo la Reforma Laboral, que eliminó derechos y beneficios en el sector privado.