Washington (EFE) – El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, logró este lunes que el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, prometiera abrir el paso de ayuda humanitaria de Kerem Shalom, cerrado tras un ataque de Hamás, y le reiteró su «clara postura» con respecto a una invasión de la ciudad sureña gazatí de Rafah.
Según informó la Casa Blanca en un comunicado, «el primer ministro acordó garantizar que el paso de Kerem Shalom esté abierto para la asistencia humanitaria de quienes lo necesitan».
El paso de Kerem Shalom, uno de los principales cruces utilizados para hacer llegar ayuda humanitaria a la Franja de Gaza, fue cerrado el domingo después de que un ataque de Hamás matara a cuatro soldados israelíes e hiriera a otros diez.
Además, Biden «reiteró su clara postura sobre Rafah», según el comunicado de la Casa Blanca, que no añade más detalles sobre esa parte de la conversación.
El Gobierno de Biden ha pedido repetidamente a Israel que antes de invadir Rafah presente un plan concreto y efectivo para evitar la muerte de civiles en esa ciudad, ubicada en la frontera con Egipto y donde se hacinan más de 1,4 millones de palestinos, que se han refugiado allí ante operaciones israelíes en el resto del enclave.
Netanyahu lleva meses reiterando su intención de invadir Rafah para eliminar a milicianos de Hamás que asegura que se esconden allí y, justo hace unas horas, el Ejército israelí ordenó evacuar a unos 100.000 residentes de Rafah.
Por otro lado, los dos líderes también hablaron sobre las negociaciones para acordar un alto el fuego en la Franja de Gaza a cambio de la liberación de rehenes israelíes retenidos en el enclave por Hamás y la liberación de palestinos presos en cárceles israelíes.
Las negociaciones están en un momento crucial tras el aparente fracaso de la última ronda celebrada este fin de semana en El Cairo. Sin embargo, Washington busca revivirlas, por lo que ayer, domingo, el director de la CIA, William Burns, llegó a Doha para continuar con las conversaciones.
Biden se refirió específicamente a ese punto y puso al día a Netanyahu «sobre los esfuerzos para lograr un acuerdo sobre los rehenes», incluyendo las conversaciones de este lunes en Doha, que acoge la oficina política de Hamás desde hace más de una década.
Estados Unidos actúa desde hace meses como mediador en esas negociaciones junto a Egipto y Catar.
Por último, ambos líderes también hablaron sobre la conmemoración del Día en Recuerdo del Holocausto, que se celebra este lunes.
En concreto, hablaron sobre el «compromiso» que comparten EE.UU. e Israel para recordar a los seis millones de judíos que fueron sistemáticamente perseguidos y asesinados en el Holocausto, uno de los capítulos «más oscuros de la historia», y acordaron «actuar con contundencia contra el antisemitismo y todas las formas de violencia motivada por el odio».