San Juan, 4 abr (EFE) – La gobernadora de Puerto Rico, Wanda Vázquez, dio este sábado instrucciones a la Guardia Nacional de la isla para hacer una «rigurosa evaluación» de los pasajeros que pudieran llegar a la isla procedentes de los cruceros Zaadam y Rotterdam que están atracados en Port Everglades (Florida, EE.UU.) y tienen a enfermos por COVID-19 a bordo.
Los primeros pasajeros desembarcados de los cruceros Zaandam y Rotterdam, que están atracados en Port Everglades (Florida, EE.UU.) por razones humanitarias, viajaron este viernes en vuelos chárter hacia distintos destinos.
Ambos barcos quedaron amarrados este jueves en distintos muelles de Port Everglades, situado a 40 kilómetros al norte de Miami, después de un largo y difícil viaje.
En un comunicado, Vázquez dijo hoy que ha ordenado al ayudante general de la Guardia Nacional, José Reyes, que una vez pisen suelo puertorriqueño, se tomen las medidas para que se les «realice una rigurosa evaluación y seguimiento a estos pasajeros».
Esto debe incluir «tomarles la muestra para verificar un potencial contagio de COVID-19 antes de salir del aeropuerto. De la prueba resultar negativa, deberán ser informados para que cumplan cuarentena obligatoria en sus residencias y se les tomará la información de rigor para que personal del Departamento de Salud pueda darles seguimiento. Si el resultado es positivo, deberán ser trasladados a un hospital», subrayó.
«Vamos a proteger a la población del potencial de contagio que por la exposición a la situación del crucero tuvieron estos pasajeros. Serán manejados con seguridad, pero sobre todo, con la sensibilidad que estos casos requieren», agregó.
Hasta el momento, se tiene información de una pareja puertorriqueña que estaba a bordo del Zaandam.
«Las personas que regresan a nuestra isla recibirán la sensibilidad humana que se requiere durante el proceso de cernimiento médico y pasarán por el mismo proceso que han pasado los sobre 46.000 pasajeros que ya hemos evaluado anteriormente. Se procederá a administrar la prueba requerida debido a la situación extraordinaria por la que estas personas han estado por los pasados días, siguiendo los protocolos establecidos por el Departamento de Salud en este proceso», dijo, por su parte, Reyes.
La importancia del seguimiento y evaluación en los aeropuertos «no puede ser minimizada, pues es la primera línea de defensa que tenemos para disminuir el contagio por COVID-19 en Puerto Rico», indicó el ayudante general de la Guardia Nacional de Puerto Rico.
El secretario de Estado de la isla, Elmer Román, recalcó que personal de su oficina se ha mantenido en comunicación con la citada pareja.
Los cruceros Zaandam y Rotterdam, con más de 2.500 personas a bordo entre los dos, llegaron este jueves a Port Everglades, donde desembarcaron los pasajeros más enfermos después de una travesía marcada por el cierre de los puertos por la COVID-19 y la muerte a bordo de cuatro personas.