Washington (EFE) – El gran jurado especial que investigó la presunta injerencia electoral en Georgia recomendó imputar a por lo menos 39 personas, entre ellas el expresidente Donald Trump (2017-2021), pero 21 de ellas quedaron finalmente fuera de la lista de acusados.
Un juez del condado de Fulton publicó este viernes el informe final del gran jurado, un documento de 26 páginas en el que aparecen los nombres de las 21 personas que finamente no fueron inculpadas, entre ellas el del senador republicano Lindsey Graham.
El pasado 14 de agosto, la fiscal Fani Willis anunció la imputación de 19 personas (18 de ellas estaban en la lista del gran jurado y una no) por estar involucradas en el intento de revertir los resultados de las elecciones presidenciales de 2020 en Georgia.
Sobre Trump pesan 13 cargos. El principal, el de violación de la ley estatal de asociación delictiva (RICO, por sus siglas en inglés), conocida por emplearse contra los integrantes de la mafia y utilizada para garantizar que los líderes de una asociación criminal, y no solo sus subordinados, rinden cuentas ante la Justicia.
Además de Trump, entre los 18 imputados estaban algunos de sus asesores más cercanos, como su ex abogado personal y exalcalde de Nueva York Rudy Giuliani y su ex jefe de gabinete Mark Meadows, entre otros, cuyos nombres estaban en el informe del gran jurado que Willis utilizó para basar la imputación.
La fiscal se sirvió de las pruebas y testimonios recopilados por el comité especial, que citó a declarar a 75 personas como testigos y recomendó imputar a casi una treintena. Finalmente, Willis solo imputó a 19.
Salieron de la lista nombres como el de Graham, aliado del expresidente, quien declaró en noviembre pasado ante el gran jurado pese a que había presentado ante el Tribunal Supremo de Estados Unidos una petición para eludir su comparecencia.
Graham, senador conservador de Carolina del Norte, fue citado porque el gran jurado investigó si llamó en 2020 al secretario de Estado de Georgia, Brad Raffensperger, encargado de certificar las elecciones, para revertir el resultado de los comicios, algo que han negado ambos funcionarios.
Según CNN, estas presuntas llamadas se produjeron semanas antes de la llamada telefónica de Trump en enero de 2021 en la que pidió a Raffensperger que le «encontrara» 11,780 votos, uno más de los que había conseguido Joe Biden.
Esta es una de las principales pruebas que Trump tiene en su contra en el caso de Georgia, uno de los cuatro procesos judiciales penales abiertos contra él.
También salieron de la lista de imputados de Willis otros nombres como los abogados de Trump Cleta Mitchell y Boris Epshteyn, el exasesor de seguridad nacional de Trump Michael Flynn y los exsenadores republicanos por Georgia David Perdue y Kelly Loeffler.
En Georgia y otros estados de EE.UU., los grandes jurados especiales no pueden emitir acusaciones criminales, pero sí tienen poder para exigir documentos y la comparecencia de testigos bajo citación judicial, dentro de un proceso que transcurre en secreto.
Al terminar su cometido, ese tipo de jurados, compuestos por entre 16 y 23 personas, emiten un informe con sus conclusiones y a veces recomiendan algunas medidas, pero corresponde a los fiscales decidir si acusan o no.