Nueva York (EFE) – Dos protestas de motivación ecologista promovidas por dos organizaciones diferentes se «colaron» el jueves en dos de los eventos más mediáticos del año en Nueva York, el Abierto de Tenis de Estados Unidos y la Fashion Week.
La primera protesta tuvo lugar durante la tarde en mitad del partido entre Coco Gauff y Karolina Muchova, cuando tres activistas de la organización Extinction Rebellion, que combate los efectos de la crisis climática, comenzaron a gritar desde sus asientos «End Fossil Fuels» (parad los combustibles fósiles).
Cuando la seguridad del torneo, ayudada por la policía de Nueva York, se acercó para sacarlos del estadio Arthur Ashe, se dieron cuenta de que uno de ellos se había pegado sus pies descalzos al suelo, por lo que tuvieron que proceder a despegarlo antes de evacuarlo del lugar.
El partido estuvo suspendido durante 49 minutos, en los que muchos asistentes se impacientaron y gritaron contra los activistas.
Mucho más comprensiva se mostró Coco Gauff, que en una rueda de prensa posterior al partido, y preguntada por lo sucedido, dijo: «No me enfadé con los que protestaron, siempre digo que hay que predicar en lo que crees, y lo hicieron de forma pacífica», resumió, sin olvidar añadir que ella sí cree en el cambio climático y que «hay cosas que tenemos que hacer mejor».
La organización convocante emitió después un comunicado y su portavoz Jack Baldwin dijo: «Hemos probado con protestas no disruptivas durante cincuenta años, y no han servido de nada. No nos dejan más remedio que recurrir a métodos disruptivos», según recoge el New York Times.
Poco después, en otro lugar de la ciudad y en un evento de apertura de la Fashion Week neoyorquina, que suele despertar gran atención mediática aunque con un público diferente, unas activistas de la organización PETA pro derechos de los animales irrumpieron en la pasarela donde desfilaban las modelos de la firma Coach.
En su caso protestaban contra el sacrificio de animales para la industria de la moda, ya sea para usar su pelo o su cuero: «Coach: Leather Kills» (Coach: el cuero mata), rezaba el cartel que portaba una de las activistas y que desplegaba por encima de su cabeza.
Pero la que más llamó la atención fue otra compañera suya, semidesnuda, que se había pintado el cuerpo por completo y sobre la pintura había escrito el mismo lema.
PETA subió inmediatamente a sus cuentas en las redes un vídeo del acto de protesta, acompañado por la siguiente frase: «Es hora de dejar de vender la piel de otros y terminar con el cuero, @Coach».
Las dos activistas dieron casi una vuelta completa a la pasarela antes de que un miembro de la seguridad se abalanzara sobre una de ellas, poniendo fin a la protesta.
Coach, que estuvo posteando imágenes de su desfile, omitió las de la protesta y no ha hecho hasta ahora la menor mención a lo sucedido.