Por Dr. César Vázquez Muñiz
Presidente y fundador de Proyecto Dignidad
Decir que Proyecto Dignidad utiliza las iglesias para hacer política, es un acto de hipocresía y falta de respeto al pueblo de Puerto Rico; cuando sabemos que todos los partidos políticos han utilizado las iglesias a su conveniencia por más de 20 años, especialmente el Partido Nuevo Progresista (PNP). En particular, los dos partidos de mayoría recurrentemente han utilizado a la iglesia para propósitos político partidistas.
El Arzobispo de San Juan es recordado por el anillo dado al Gobernador electo Aníbal Acevedo Vilá, acción que después repitió con la Comisionada Residente Jennifer González. En campaña política Pedro Rosselló se autodenominó el “Mesías”, creando una coreografía y recibiendo una bendición pastoral en el culto de una iglesia muy reconocida. Que conste, no hay nada malo en que un líder religioso ore por un político. La iglesia está llamada a eso, pero no nos llamemos a engaño. Mientras nosotros oramos por ellos, a muchos no les importa nuestra oración, si no toda exposición que rinda frutos electorales. Ricardo Rosselló firmó un compromiso para apoyar una agenda de valores frente a un grupo de pastores en una iglesia del área metropolitana. Recibió el apoyo de muchos en el pueblo cristiano. Demás está decir que luego los traicionó.
Aunque no es un partido religioso como tal, Proyecto Dignidad nunca ha escondido ante el pueblo de Puerto Rico dónde y porqué surgió como partido. Sabemos que el pueblo de fe, de valores y conservador ha sido manipulado como balón político cada vez que se acercan las elecciones o contiendas de primarias. Por tal razón, un gran grupo de hombres y mujeres con principios cristianos decidió no servir más a estos partidos que han llevado a Puerto Rico a la quiebra gubernamental más grande de la historia de los Estados Unidos. Así nace Proyecto Dignidad. El partido ha sido invitado a las iglesias, no por la institución, si no por sus feligreses quienes mientras son ciudadanos del Estado; también son miembros de la iglesia a la que sostienen. Tienen el derecho a hacerlo; y a preguntarse qué proyecto político defiende sus libertades, a sus niños y a sus derechos como padres. Lo otro es vivir engañados por aquellos que cada cuatro años se aprenden un lenguaje religioso para dar una falsa impresión cuando realmente son lobos vestidos de ovejas.
El gobernador Pedro Pierluisi reconoce la importancia del voto cristiano. Ha llevado un “media tour” organizado desde las diferentes oficinas de base de fe reuniéndose con pastores para darles la impresión de qué es un conservador que cree en los valores de la iglesia, cuando realmente es un liberal que apoya toda la agenda “woke”. Esa ha sido su trayectoria como Comisionado Residente y como Gobernador. “Profesan conocer a Dios, pero con sus hechos lo niegan”.
Ahora como el rey Belsasar, el Gobernador ha visto la escritura en la pared. “Fuiste pesado en balanza y haz sido hallado falto”. En puertorriqueño significa: “Tus días están contados. La derrota es segura”.
El mensaje de Proyecto Dignidad a la iglesia es claro: Es responsabilidad cristiana votar para elegir el gobierno, pero hay que votar por aquellos que respaldan nuestros valores. Para eso tenemos que votar conociendo por quién votamos. Proyecto Dignidad es el único partido conservador que postula y defiende los valores históricos judeocristianos del pueblo de PR.