Por Sandra D. Rodríguez Cotto
En Blanco y Negro con Sandra
San Juan – Para la exfiscal y analista Mayra López Mulero, el caso y la convicción federal contra el productor mediático Sixto George es sólo el comienzo. Aseguró que sabe que las autoridades federales están investigando las prácticas de manipulación política en los medios de comunicación en Puerto Rico. La sentencia abre las puertas a nuevas investigaciones y a intensificar las pesquisas en curso contra funcionarios públicos.
“Lo más importante, para que no lo perdamos de vista, es que este caso abre una caja de Pandora. Este caso va a provocar una mirada profunda sobre las formas en que se manejan las comunicaciones en Puerto Rico, tanto a nivel corporativo como a través de otras plataformas emergentes e independientes, que no están atadas a las líneas editoriales, ni a los intereses de las grandes corporaciones. Esto es un tema crucial para el país”, manifestó López Mulero.
El viernes un jurado en el Tribunal Federal encontró al productor Sixto Jorge Díaz Colón (Sixto George) culpable por los delitos de extorsión, intento de extorsión y destrucción de evidencia. Estos delitos se consumaron en su intento de manejar la crisis que había en el gobierno de Ricardo Rosselló durante el Verano del 2019, tras las protestas masivas que se precipitaron por la revelación de un chat misógino, homofóbico y fascista, en el que figuras externas a La Fortaleza decidían atacar a periodistas y tomaban decisiones económicas y políticas sobre el Gobierno.
El juez federal Francisco Besosa ingresó a Díaz Colón de inmediato a la cárcel hasta la vista de sentencia que será el 5 de mayo. Se expone hasta a 20 años de prisión por cada delito.
“Las acciones de Sixto George y de otros exfuncionarios del gobierno, como trascendió en el juicio, constituyen una amenaza a la libertad de expresión y un atentado a los principios democráticos”, dijo López Mulero.
Opinó que quizás al principio del juicio no había una plena conciencia de las implicaciones que este caso tendría para la industria mediática del país, pero la jurista expresó que, sobre la marcha, las empresas se dieron cuenta de que lo ocurrido en sala puso en juego la integridad de los empleados y trabajadores de la prensa, así como de las comunicaciones.
“Este señor, con sus acciones, puso en entredicho la integridad de toda una clase que es indispensable en una democracia. Un país que se respete a sí mismo tiene la obligación de acceder a la verdad. Los periodistas tienen que acceder a la verdad para explicarla, y que el público que esté mirando, pueda tener los conocimientos necesarios para llegar a sus propias conclusiones en una libertad absoluta de pensamiento”, acotó.
“Sixto no creía en eso, pero Sixto no estuvo solo. Fue útil para aquellos amigos asiduos de sus programas hasta que ya no lo necesitaron más”, agregó López Mulero.
Recordó el incidente del 15 de julio de 2019 cuando, siendo ella la presentadora del programa Nación Z, que producía Sixto George por Mega TV, le negaron acceso al estudio para impedir que pudiera hacerle preguntas al exgobernador Rosselló. El exlegislador y portavoz simpatizante del gobierno, Gary Rodríguez controló la entrevista con preguntas preparadas por Sixto George. Esto fue en el contexto de las protestas de ese verano, luego de que se revelara el escandaloso chat de Telegram.
En aquel momento, oficiales de la Policía impidieron el paso y por poco agreden a López Mulero. Al salir del canal, esta periodista le expresó la necesidad de denunciar ese intento de acallarla. Entonces procedimos a transmitir en vivo por las redes sociales un programa especial de En Blanco y Negro con Sandra, y de Mayra López Mulero.
Sus reclamos también aparecen consignados en una carta que la exfiscal envió a la gerencia de Mega TV y al propio Sixto George (Ver documento).
“Les salió el tiro por la culata, porque ellos intentaron limitar las preguntas. No pueden ser tan ingenuos. Ahora vamos a por los otros”, dijo López Mulero.
Reiteró que sabe de las pesquisas en curso y otras que las autoridades federales están próximas a comenzar para investigar el nivel de las prácticas de manipulación política en los medios.
“Yo creo que en Puerto Rico con esta realidad que estamos observando, vamos a poder madurar como pueblo y vamos a poder elevar nuestro entendimiento y nuestro intelecto, para separar el grano de la paja y no permitir que la demagogia se convierta en el discurso que prevalezca. Basta ya de mentiras, basta ya de manipulación, de demagogia. Llegó el momento del discurso de la verdad, y eso queda probado con este desenlace de Sixto George”, manifestó.
Por otra parte, López Mulero entiende que, en el caso de Sixto George, el ministerio público tenía suficiente evidencia, por lo que prescindieron del testimonio de su cliente, Raúl Maldonado hijo, conocido como Raulie.
“Si Sixto George cumplía con su amenaza de que iba a sentarse (a declarar), muy probablemente la carta ganadora sería Raulie en un “rebuttal” o prueba de refutación después”, expresó.
Sin embargo, opinó que el productor mediático no usó eso a su favor, ya que lo dominó su imprudencia. Criticó sus acciones irregulares al desafiar los procesos y al Tribunal, cuestionando la pureza de los trámites y cuestionando la integridad de los jueces, de los fiscales y de los agentes del FBI.
“Si hubiera hecho como cualquier persona racional y sensata y hubiera concentrado sus energías en ver el caso y defenderse tranquilamente, humildemente, tenía un “fighting chance” (oportunidad de pelear). Sinceramente, el peor testigo contra Sixto George se llama Sixto George”, dijo López Mulero, quien emitió expresiones similares a estas en otra entrevista con la periodista Celimar Adames, en TeleOnce.