Por Sandra Rodríguez Cotto
Especial para EyBoricua
San Juan, 29 de septiembre – Callados y alejados de la propaganda oficialista y de los espectáculos mediáticos, el sector privado se ha estado moviendo en los más altos niveles del Gobierno Federal para lograr que se agilice la entrega de los fondos de la reconstrucción y tratar de evitar que se estanque aún más la economía de Puerto Rico.
Hoy, precisamente, están en la Casa Blanca donde se reunirán con altos funcionarios de la administración Biden a cargo de la reconstrucción, confirmó a En Blanco y Negro con Sandra el presidente de la Cámara de Comercio, Cameron McKenzie. La reunión será a la 1:00 p.m.
El ejecutivo también confirmó que promovieron y lograron tener una reunión urgente con la Junta de Control Fiscal. En esa reunión que ocurrio el sábado, participaron los representantes de 18 sectores de la economía que presentaron las respectivas necesidades y exigieron acción del ente a cargo de las finanzas de Puerto Rico. Dicha reunión también fue coordinada por la Cámara de Comercio y se hizo de manera virtual, ya que la mayoría de los miembros de la Junta manejan las finanzas de la isla desde distintos estados.
McKenzie tambien exigió que cesen las controversias entre LUMA Energy y la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE).
«En el sector privado endentemos que hay una lucha de poder entre la AEE y LUMA Energy. Esa guerra ha causado que se atrasen todos los procesos de reconstrucción energética. Quisiéramos ver un enfoque del Gobierno Federal que ese gobierno invierta lo más rápido posible, pero necesitamos que la gente nos ayude a fiscalizar. Esto es una cuestión de seguridad nacional», dijo McKenzie.
«Hay 9,000 millones para recuperar el sistema energético pero esa lucha de poder entre LUMA y la AEE nos está hundiendo. Nos quita las posibilidades de levantar la economía. Hay que actuar», añadió.
El liderato del sector privado que lleva estos reclamos incluye a representantes de manufactura, agricultura, salud y comercio, entre otros, que temen que la recesión que se avecina, hunda las posibilidades de Puerto Rico.
Hay urgencia porque todos los sectores productivos se han visto afectados por la falta de electricidad, el paso del huracán Fiona y el panorama puede agudizarse para Puerto Rico por los efectos del huracán Ian en la cadena de distribución y el otorgamiento de fondos para Florida.
«Nosotros, desde la perspectiva de la Cámara de Comercio, lo que queremos es que ejecuten y que empiece a fluir el dinero. Esto es lo que nos va a dar la protección en la economía en estos momentos de tanta crisis mundial», dijo McKenzie.
«Estamos viendo una inflación dramática, un incremento en las tasas de interés, la guerra entre Ucrania y Rusia que sigue escalando, el huracán Ian en la Florida y lo que pasó en Fiona. Nosotros tenemos la capacidad con esos fondos federales, de convertir cualquier complejidad que se de a nivel mundial en una oportunidad para proteger la economía de Puerto Rico. Lo que se ve que viene no es bueno. Es una recesión, y con esos fondos ayudarnos el enfoque. Necesitamos agilizar esto para que active al sector privado y que haya transparencia», agregó.
Reclamó además que todos los sectores sociales se unan.
«Tenemos que asegurarnos que los políticos entiendan que el sector privado es el motor de la economía, que genera los empleos, que pagan los impuestos. Para poder tener una economía robusta, en Puerto Rico tiene que seguir la presión a la AEE y a LUMA para que ejecuten y levanten el sistema (eléctrico)», dijo McKenzie.
«Hay que reclamar transparencia del gobierno y combatir la corrupción, pero no todo se puede ver en peleas constantes porque eso también es contraproducente para Puerto Rico. Necesito transparencia, necesito que el Gobierno trabaje. Necesito que ejecute, pero si ellos ven al sector privado como un enemigo, entonces no logramos el objetivo de mejorar a Puerto Rico», agregó.
En cuanto a la reunión que tuvieron con la JCF, explicó que cada sector presentó los puntos de interés y las preocupaciones más apremiantes tras el paso de Fiona, y que, abrumadoramente, todos hablaron de la falta de electricidad, la falta de acceso al agua, los problemas de distribución del diésel, la destrucción de la agricultura y la gravedad de los problemas que enfrenta el sector de salud.
Entre las cosas que exigieron a la JCF los líderes de sector privado fue que se distribuya con urgencia dinero en efectivo para los agricultores porque tienen que limpiar las tierras para que no se dañen con el material vegetativo causado por la destrucción del huracán.
«Los temas que más se repitieron fueron la distribución inmediata de fondos y la queja constante era que el gobierno no se preparó» dijo McKenzie.
Otras exigencias a la Junta fueron: la falta de planificación entre el Gobierno y el gobierno anterior; la sorpresa de los miembros de la junta que no entienden por qué el huracán Fiona cogió al gobierno desprevenido e improvisando.
Cuestionaron además que la JCF no ha presentado los planes que ellos tienen, «si es que los tienen», y pidieron que agilicen el dinero que se necesita.
También denunciaron los problemas en la distribución de agua, combustible y el por qué LUMA se tardó tanto en restablecer la electricidad en las zonas que no se afectaron por Fiona.