Varadero (Cuba), 2 de mayo de 2022 (EFE) – Cuba está implementando medidas para desarrollar un turismo sostenible y armonioso con el medioambiente, afirmó este lunes la ministra de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente, Elba Rosa Pérez.
Las acciones incluyen la demolición de estructuras permanentes sobre las dunas y el incremento de las zonas de sombra en la franja de arena y espacios públicos, añadió Pérez al intervenir en un evento sectorial en Varadero, el principal polo turístico de sol y playa de Cuba.
El encuentro es la antesala de la Feria Internacional de Turismo (FitCuba) que se celebra desde este martes y hasta el día 7 en este conocido balneario.
Pérez sostuvo que Cuba tiene «potencialidades» para desarrollar el turismo sostenible, pero reconoció cuestiones pendientes como colocar paneles solares fotovoltaicos en techos o parqueos y desarrollar una arquitectura bioclimática.
En el evento sobre turismo sostenible, al que asiste también el primer ministro y titular de Turismo entre 2004 y 2019, Manuel Marrero, Pérez reconoció la importancia del sector para el desarrollo económico del país.
Afirmó que las medidas tomadas para avanzar hacia el «novedoso concepto» de la sostenibilidad forman parte del plan estatal «Tarea Vida», una estrategia gubernamental puesta en marcha en 2017 para mitigar los efectos del cambio climático en la isla caribeña.
El turismo representaba antes de la pandemia la segunda área económica de Cuba, por detrás de la venta de servicios profesionales al exterior, y aportaba cerca del 10 % del producto interno bruto (PIB).
También empleaba a aproximadamente medio millón de personas en el sector estatal y un alto porcentaje de trabajadores del sector privado.
Tras el cierre obligado por la pandemia, Cuba reabrió los viajes desde el exterior el pasado noviembre y prevé una recuperación progresiva del sector.
El Gobierno espera recibir 2,5 millones de visitantes internacionales en 2022 e ingresar unos 1.159 millones de dólares (1.012 millones de euros).
Las autoridades no han modificado estas previsiones pese a la variante ómicron y las consecuencias de guerra en Ucrania, que ha afectado al turismo ruso.