La Haya, 2 de febrero de 2022 (EFE)- El 67% de las niñas y mujeres jóvenes de entre 12 a 25 años aseguran haber sido acosadas en la calle en Países Bajos durante el primer año de la pandemia, según datos publicados este miércoles por la oficina nacional de estadísticas (CBS), que investigó por primera vez el fenómeno de la intimidación callejera en el país.
Una cuarta parte de las mujeres han sido perseguidas o abordadas en la calle durante el mismo periodo, y el 85% de ellas se han sentido “inseguras” o “asustadas” en esa situación, según se desprende de una encuesta que involucró a más de 8,000 personas.
Aunque la encuesta empezó a hacerse a principios de febrero de 2021, las cifras se refieren a los doce meses anteriores al inicio de la investigación, un periodo que cae casi en toda su totalidad en la crisis del coronavirus.
Los datos también muestran que las mujeres de 18 a 21 años son las más propensas a denunciar el acoso callejero, aunque alrededor del 70% de las adolescentes de entre 14 y 18 años dicen que se han sentido intimidadas en la calle.
Las mujeres han señalado los silbidos como la forma “menos intimidante” de acoso y es algo que experimentan como “particularmente incómodo”, aunque al menos el 21% de ellas han normalizado esta forma de acoso que ya no les “impresiona en absoluto”.
Las mujeres víctimas han denunciado que las situaciones “más amenazantes” son los acercamientos o seguimiento.
La mitad de las encuestadas ha advertido de que les “irrita” o “se enfadan” cuando se dirigen a ellas con palabras, lo que además les hace sentirse “inseguras” o “asustadas”.
La respuesta más común al acoso callejero es ignorarlo y las mujeres que se enfrentan a estas situaciones buscan la compañía de otras personas o llaman a alguien por teléfono.
En cuanto al sexo masculino, 1 de cada 3 chicos han dicho haber experimentado acoso en la calle en ese mismo periodo, lo que a menudo afecta más a los adolescentes que los hombres adultos jóvenes, y los gritos son la forma más común de acoso sufrido.
Un 55% de los casos ha ocurrido en municipios más rurales, mientras que el 75% ha sido en zonas altamente urbanizadas, con cuatro ciudades concentrando los datos más altos: Ámsterdam, Róterdam, La Haya y Utrecht.
Dado que es la primera vez que la CBS investiga el fenómeno de la intimidación callejera, no se pueden hacer comparaciones con la situación previa a la pandemia.