Por Miguel Díaz Román
Especial para EyBoricua.com
San Juan (18 de enero de 2022) – En un evidente síntoma de disfuncionalidad, mientras la Oficina para la Reglamentación de la Industria Lechera (ORIL), autoriza el decomiso frecuente de miles de cuartillos de leche producida por ganaderos locales y avala, además, la exportación de leche del país a la República Dominicana, simultáneamente, ha aprobado que la planta procesadora Vaquería Tres Monjitas importe leche producida por ganaderos estadounidenses, en la modalidad de leche UHT, elaborada por una planta ubicada en el estado de New York.
La insólita realidad de leche importada y vendida bajo la marca Tres Monjitas, fue denunciada por ciudadanos quienes se comunicaron con EyBoricua.com tras descubrir en las góndolas de un supermercado el producto. Se trata de la leche UHT de la marca Tres Monjitas con 2 % de grasa, que se distribuye en envases de 32 onzas.
Del envase se desprende que la leche fue importada desde la planta “36-8580”, que corresponde a la empresa Ultra Dairy LLC, ubicada en la ciudad de Syracuse, en el estado de New York. La empresa se dedica a elaborar leche UHT, leche fluida y también produce otros productos lácteos, bajos en grasa y en lactosa.
Orlando González, gerente general de Vaquería Tres Monjitas, indicó que la importación de leche UHT fue una determinación que la empresa tuvo que tomar porque el pasado año la planta Indulac, que procesa y envasa la leche UHT para la marca Tres Monjitas, “solo tenían abastos para su producción de leche y decidieron no producir para terceros”.
González dijo que ante esta situación, “luego de estar varios meses fuera el mercado, Tres Monjitas se vio obligado a buscar alternativas de importación del producto para poder cumplir con los pedidos de sus clientes, mientras se estabilizaba la producción de leche localmente. Esa orden del producto UHT que se trabajó con el suplidor externo (Ultra Dairy LLC), requería una cantidad mínima de producción que se ha ido despachando, mientras, a la misma vez, Indulac comenzó nuevamente la producción de leche UHT bajo la marca Tres Monjitas”.
El ejecutivo explicó que la producción se divide aproximadamente en 67% de leche UHT producida con leche de ganaderos puertorriqueños y procesada por Indulac, y 33% de leche UHT importada.
González indicó que la leche importada se limitará al producto ya entregado por la planta Ultra Dairy LLC y que al finalizar ese inventario, Tres Monjitas comenzará nuevamente a vender leche UHT elaborada con leche del país. No obstante, aclaró que para cumplir con ese objetivo la empresa depende de que la planta Indulac “pueda suplir la demanda”.
“Una vez se consuma esa tirada de cartones de leche importada y siempre y cuando Indulac pueda suplir la demanda, se continuará distribuyendo leche UHT de Tres Monjitas producida solo por Indulac con leche 100% de Puerto Rico”, explicó González.
La planta Indulac es considerada en la reglamentación de la ORIL como una planta de balance, que debería dedicarse a procesar exclusivamente los excedentes de leche y convertirlos en leche UHT y otros productos lácteos. Pero tras la aprobación de la venta de la planta Indulac a la Cooperativa de Productores de Leche de Puerto Rico (COOPPLE), la planta opera como otra empresa comercial, en competencia con las plantas Suiza Dairy y Tres Monjitas.
Incluso, con la autorización de la ORIL, Indulac tiene asignados varios ganaderos cuya producción es orientada exclusivamente a esa planta, una determinación que ha sido impugnada por Suiza Dairy en los tribunales.
El secretario de Agricultura, Ramón González Beiró, sostuvo que, ”en este momento importar leche no es ilegal, pero es inmoral. En eso estamos de acuerdo”.
González Beiró dijo que era “irresponsable” catalogar a la ORIL de disfuncional, debido a que la importación de leche obedece a una escasez del producto que aconteció en el 2020, cuando tanto Tres Monjitas como la planta Indulac se vieron obligadas a importar el producto para poder cumplir con sus compromisos.
Según González Beiró, la importación de leche realizada por Tres Monjitas responde a un contrato que esa empresa acordó en 2020 con la planta Ultra Dairy LLC de New York, cuya vigencia estaría por finalizar próximamente.
“Hoy de acuerdo a las negociaciones que hemos tenido y a la buena comunicación entre las plantas, Tres Monjitas está terminando su relación de negocios con la planta de New York y ya tiene un pedido de más de 200,000 litros a Indulac y va a continuar comprando leche en Puerto Rico. Por eso decir que la ORIL es disfuncional … .aquí hay otras cosas envueltas. Igual que otra gente trae leche importada, pues Tres Monjitas tiene derecho, desgraciadamente, a solicitar una licencia (de importación). En este momento importar leche no es ilegal, pero es inmoral. En eso estamos de acuerdo”, dijo el secretario.
González Beiró planteó que la licencia de importación de Tres Monjitas aconteció durante la incumbencia del exsecretario de Agricultura, Carlos Flores Ortega, “cuando los picos (de alta producción de leche) eran bien pronunciados y los decomisos de leche eran millonarios”.
El secretario agregó que en momentos cuando la producción de leche sufra reducciones, Indulac cumplirá con el procesamiento y envase de leche UHT para las marcas privadas, aunque en menor cantidad.
Javier Lugo Rullán, director ejecutivo de la ORIL, indicó que respondería nuestras interrogantes en una futura entrevista.
Por su parte, Flores Ortega dijo que tras el huracán María en el 2017 aprobó una licencia de importación de leche para Tres Monjitas porque los daños causados por el ciclón afectaron grandemente al sector ganadero, que dejó de producir leche.
“Fue una situación extraordinaria. Y eso ya se ha hecho en otros sectores como el de plátanos y de pollos, que tiene sus licencias de importación. Es una medida para que esas empresas puedan cumplir con sus clientes cuando hay problemas de abastos. Pero esas licencias se revisan y se van reduciendo (la cantidad que se pueden importar), según se va normalizando el mercado. Para que Tres Monjitas estuviera importando leche en este momento, cuando se está decomisando leche, la ORIL lo tuvo que aprobar y eso es disfuncional, porque aquí se está botando la leche”, sostuvo Flores Ortega.
Agregó que la determinación de la ORIL de avalar la importación también ha colocado a los ganaderos locales en desventaja, pues esa oficina le exige unos requisitos de calidad en la leche que excedan los parámetros requeridos al ganadero en los Estados Unidos.
“La leche que es importada no cumple con los altos requisitos que exige la ORIL al ganadero local y eso coloca en desventaja al ganadero, porque se está importando leche que es de menor calidad que la que se produce aquí”, agregó el secretario.
“Este no es el momento de importar leche. Si se está decomisando leche y se está importando leche y exportando leche a la República Dominicana, eso quiere decir que las plantas no pueden procesar la leche que se produce aquí. ¡Qué otra cosa se puede concluir!”, dijo Flores Ortega.