San Juan, 20 de diciembre de 2021 (EFE) – El nuevo alcalde de Cataño, Julio Alicea, prometió este domingo sacar por fin «las manzanas podridas» del municipio, pero Gabriel Sicardó regresó a los tribunales en su pugna por hacerse con la alcaldía.
Horas después de jurar el cargo de alcalde, Alicea explicó que no cobrará su sueldo como ejecutivo municipal, sino que vivirá de su actual pensión, y que ese emolumento se destinará a ayudar a la gente «más necesitada».
En la misma línea, aseguró que el vehículo del alcalde lo usará solo para funciones oficiales y que no utilizará un celular pagado con fondos públicos.
También afirmó que cancelará múltiples contratos de servicios profesionales y de asesoría que no son necesarios en Cataño y que calcula le ahorrarán al municipio unos $154,000 anuales.
«Sé que los buenos empleados somos más, pero tenemos que sacar las manzanas podridas», subrayó Alicea, quien recordó que Cataño lleva golpeado por la corrupción desde el 2008 con la detención del exalcalde Wilson Soto.
Por ello, indicó que dedicará más recursos a la auditoría interna y aseguró que sabe como detectar, identificar y combatir la corrupción: «Tengo el carácter, tengo la experiencia y tengo la dedicación para arrancar de raíz la corrupción en Cataño», aseveró.
Alicea juró el cargo después de que la Comisión Estatal de Elecciones (CEE) lo certificara como candidato único, tras la determinación del Directorio del Partido Nuevo Progresista (PNP) de descalificar a Sicardó.
Sicardó era el alcalde interino tras la renuncia a principios de diciembre de su jefe, Félix «El Cano» Delgado, quien se declaró culpable de participar en un esquema de corrupción por el que recibió pagos en efectivo a cambio de adjudicar contratos a una empresa.
Las razones alegadas por el Directorio del PNP son la injerencia de Sicardó en los contratos otorgados por el municipio a una compañía señalada en una investigación federal y su desempeño al mando de la División Legal y Asuntos Públicos, entre otras.
Sin embargo, Sicardó sometió hoy ante el Tribunal de Primera Instancia una moción en la que exige que se declare en «desacato» al PNP por no demostrar con evidencias los argumentos que fundamentan su descalificación como aspirante a la alcaldía de Cataño.