París, 1 dic (EFE) – Después de haber resistido bien a la crisis de la covid, las energías renovables aumentarán su capacidad instalada en 2021 un 3% respecto a 2020, hasta alcanzar los 290 gigavatios, un nuevo récord de expansión, señala en su informe anual del sector la Agencia Internacional de la Energía (AIE).
A pesar de congratularse por la tendencia al alza de las energías limpias -la agencia pronostica un aumento del 60% de sus nuevas capacidades hasta 2026, con China como líder-, el organismo alerta de «los nuevos desafíos» para las renovables impuestos por el alza general de los precios de la energía y de las materias primas.
«Sin embargo, los elevados precios de la gasolina hacen que las renovables sean más competitivas», matiza en el documento Fatih Birol, el director de la AIE.
Birol enfatiza que la puesta en servicio de 290 GW de capacidad instalada de renovables durante 2021 es «otro signo de que la nueva economía global de la energía está al alza».
La energía solar representará más de la mitad de la expansión de las renovables este año, seguida por la eólica y la hidráulica.
Las energías limpias supondrán casi el 95 % del total de la expansión global energética hasta 2026, recalca la AIE. Durante los próximos cinco años, China encabezará la capacidad instalada de renovables, acumulando el 43% del crecimiento global, seguida por Europa, Estados Unidos e India
«Estos cuatro mercados acumularán el 80% del aumento de la capacidad instalada de renovables en el mundo», destaca el documento.
Para ilustrar la emergencia de las renovables, la AIE recuerda que para 2026 habrá instalados en todo el mundo 4,800 gigavatios, lo que equivaldrá a la capacidad actual conjunta de las energías fósiles y de la nuclear.
El informe, no obstante, advierte de importantes obstáculos estructurales para el despegue pleno de las renovables, como falta de incentivos, dificultad de financiación y cierta oposición social que ha llevado a la cancelación o aplazamiento de proyectos.
¿EXPLOSIÓN DEL HIDRÓGENO VERDE?
Otro de los vectores de las energías limpias, los biocombustibles, verán aumentar su demanda «más del doble» hasta 2026. India, la Unión Europea, Estados Unidos y China planean o ya están llevando a cabo políticas para impulsar esta energía.
Una de las trabas que puede ralentizar su crecimiento es «el coste relativamente superior de los biocombustibles en relación a la gasolina o el diésel en la mayoría de los mercados», advierte el informe.
India subirá en 2026 al tercer puesto como principal mercado de etanol, uno de los principales tipos de biocombustible. Estados Unidos y Brasil completarán el podio. Asia superará en cinco años a Europa como productor mundial de biocombustible.
La explosión del hidrógeno verde también es abordado en el informe: «Mientras grandes empresas y países han anunciado ambiciosos planes para la expansión del hidrógeno verde en las próximas dos décadas, es aún incierto cuántos de esos proyectos saldrán del papel en el momento prometido y con la dotación suficiente», anota el informe.
Uno de los principales obstáculos para esta energía es que «en muchos lugares del mundo la producción de hidrógeno a partir de renovables es más cara que mediante energías fósiles».
Según la AIE, se espera que hasta 2026 aumente en 18 GW la capacidad instalada de plantas para la producción de hidrógeno a base de energías renovables. Esos 18 GW «solo representa el 1% del crecimiento previsto» en capacidad instalada de todas las energías limpias.
En caso de que se lleven a cabo los proyectos previstos, China, Chile, España y Australia acumularían el 85% de la expansión mundial del hidrógeno verde en los próximos años.
REDOBLAR LOS ESFUERZOS CLIMÁTICOS
Aunque la AIE aplaude la apuesta mundial por la energía limpia, el organismo con sede en París estima que los gobiernos deben esforzarse aún más para cumplir con las metas de la COP26 de lograr la neutralidad de carbono en 2050.
«Para alcanzar esa meta habría casi que doblar, en media durante el periodo 2021-2026, las capacidades instaladas de las renovables que figuran en este reporte», reconocen los autores del informe.
Paralelamente, la demanda mundial de biocombustibles y la de calefacción procedente de fuentes limpias tendría que crecer hasta tres y cuatro veces más que lo previsto en el documento, respectivamente.