Santa Cruz de La Palma, 21 de septiembre de 2021 (EFE) – El río de lava del volcán de la isla española de La Palma, que cuenta con una boca eruptiva más y está a punto de alcanzar el mar, sepultó ya 166 viviendas y cubre 103 hectáreas de terreno.
Mientras siguen evacuados más de 5,500 vecinos de esta isla del archipiélago atlántico de Canarias, muchos de los cuales perdieron sus casas y todas sus pertenencias.
La aparición la pasada noche de una nueva boca volcánica en las cercanías del pueblo de Tacande, en El Paso, obligó a los servicios de emergencia a ampliar las evacuaciones y ralentizó el avance de las coladas de lava hacia el mar, su salida natural.
La nueva boca volcánica ha surgido a 900 metros de la principal y en la misma localidad donde a primera hora de la noche de ayer se registró un terremoto de magnitud 4.1, el mayor de los que han tenido lugar en la zona desde el inicio de la erupción, a las 3:13 p.m. del pasado domingo.
Además el Instituto Geográfico Nacional ha localizado tres movimientos sísmicos en La Palma durante la madrugada de este martes, uno de los cuales ha sido de magnitud 3.2 y a un kilómetro de profundidad, en el municipio de El Paso.
La aparición de la nueva boca eruptiva ha obligado al Cabildo (administración local)de La Palma a cerrar cinco carreteras de esta isla, de unos 85,000 habitantes.
Una imagen tomada por un satélite de la Unión Europea Copernicus ha permitido calcular la superficie cubierta por la lava que a las 19:50 horas de ayer lunes ascendía a 103 hectáreas, mientras disminuía el movimiento lávico y el tremor, aunque no así la actividad eruptiva, especialmente si se tiene en cuenta que se está al inicio del evento volcánico.
El Instituto Volcanológico de Canarias (Involcan) calcula que el volcán emite entre 7,997 y 1,665 toneladas diarias de dióxido de azufre (SO2) a la atmósfera, un dato que consideran fundamental para poder calcular la fecha final de la erupción
Por su parte un buque del Instituto Español de Oceanografía (IEO) viaja ya hacia La Palma para reforzar los equipos de investigación que trabajan en la zona y estudiar los posibles efectos de la colada al mar.
La situación económica que deja esta erupción volcánica es de «auténtica ruina, se mire por donde se mire», según los pescadores y agricultores de la isla.
Los efectos de la lava han afectado por ahora a entre 300 y 400 explotaciones agrícolas, especialmente de plátano, y han llevado al Gobierno canario a anunciar la concesión de 1.1 millones de euros (cerca de $1.3 millones) en subvenciones para ayudar a paliar los daños.
Entretanto continúan llegando a La Palma refuerzos para ayudar en las tareas de evacuación y en la extinción de los incendios que ocasione la erupción del volcán, entre ellos tres nuevos hidroaviones forestales desplazados este martes por el Ejército del Aire y miembros de cuerpos de bomberos forestales y urbanos.
Además, la Unidad Militar de Emergencias (UME) podría enviar mañana miércoles más efectivos a la isla, después de que ayer lunes se desplegaran en La Palma 60 miembros del Segundo Batallón con sede en la base de Sevilla (sur), que elevaron el contingente de ayuda a 180 efectivos y 57 vehículos.
El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, permanece en La Palma donde tiene previsto asistir este mediodía, junto al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, a una nueva reunión del Comité Director del Plan Especial de Protección Civil y Atención de Emergencias por Riesgo Volcánico (PEVOLCA).