San Juan (EFEUSA) – El chef puertorriqueño Andrés Cárdenas se ha destacado en los últimos cinco meses como el principal cocinero de los Rockets de Houston en la NBA y en cuya cocina incluye el sazón caribeño con su propio sofrito, pero de una manera nutritiva para ayudar al desempeño de los jugadores.
Cárdenas, de 32 años, logró esta gran meta profesional, según relató en entrevista con Efe, al tiempo que terminaba su bachiller en Gerencia Culinaria de la Universidad Ana G. Méndez (UAGM) de Carolina, municipio aledaño a San Juan, y del que logró obtener su diploma hace varios días.
Esta nueva oportunidad para Cárdenas la obtuvo después de trabajar y destacarse en varios restaurantes, como Marmalade, en el Viejo San Juan, y en el Ritz Carlton de Dorado (norte), así como en el San Antonio Country Club (Texas), junto al puertorriqueño Nelson Millán, y en Luisiana.
Pero, fue a través del dominicano Oscar Mejías, chef en el Hotel Westin Houston Downtown y de varios peloteros, entre ellos, el puertorriqueño Carlos Correa, quien conociendo la experiencia y el compromiso de Cárdenas, lo refirió para el puesto en la cocina de los Rockets que administra la empresa Landry’s.
«A mi llegada a Houston, recuerdo que estaba totalmente nervioso, porque uno va a un nuevo escenario en su vida y a un nivel bastante competitivo. Y es una transición de vida, de ahora para ahora», recordó Cárdenas.
Un tiempo después de esa entrevista, Cárdenas recibió una llamada de la administración de los Rockets para notificarle que sería el nuevo chef ejecutivo del equipo, trabajando específicamente en la cocina del Toyota Center, en Houston, y confeccionando comida para 50 personas.
«Siempre fue un sueño el ser parte de un equipo de ese nivel. Digo que estoy bendecido. No fue que tuve suerte. He trabajado duro, tomando muchas certificaciones, mucho ‘networking’ y estudiando mucho», dijo.
«Dios siempre tiene para ti muchas oportunidades y cuando te va a tocar, tienes que estar bien preparado, auto-educándote y teniendo mucha disciplina. Esto es una profesión bien competitiva y demandante», agregó.
Y desde que llegó como el máximo cocinero de los Rockets, uno de los equipos que cuenta con dos jugadores de alto calibre, como James Harden y Chris Paul, Cárdenas ha incorporado la cocina puertorriqueña con un sofrito propio que confecciona, pero con ingredientes que ayuden al rendimiento de los deportistas.
«Trato de incorporar mi cocina, adaptando mis sabores para satisfacer la cultura y la nutrición», explicó Cárdenas, al tiempo en que mencionó que algunos de los platos que prepara son de la cocina francesa, italiana y del sur de Estados Unidos.
No obstante, Cárdenas sostuvo que en dicho tipo de cocina, éste y sus dos ayudantes, trabajan en platos sanos, vegetarianos o veganos y hasta sin gluten, como debe ingerir Paul, o sin cerdo por creencias religiosas, como ocurre con el delantero fuerte Kenneth Faried.
De igual manera, explicó que para confeccionar sus platos de la manera más nutritiva posible, incluyendo tres tipos de proteínas, tres bases de carbohidratos e igual número de vegetales, con pescado fresco y vegetales frescos, compra en fincas locales.
Cárdenas, quien en una ocasión jugó con la selección de balonmano de Puerto Rico, contó que su interés por la cocina arrancó estudiando Nutrición y Dietética en la Universidad del Turabo en Gurabo, aunque sus raíces provienen de los platos de su madre, abuela y tías.
«De cada cocina tienes algo que aprender», afirmó Cárdenas en su residencia en Río Grande, municipio en el noreste de Puerto Rico.
Y, como parte de sus estudios, tomó un curso de nutrición deportiva, que por su experiencia en el balonmano, dijo que vio «una interés dentro de lo que es la nutrición y el deporte y me di cuenta que me gustaba mucho la cocina».
Fue entonces que decidió entrar a la UAGM en Carolina, ante conocida como Universidad del Este, para estudiar Gerencia Culinaria, trabajar en varios restaurantes en la isla, hasta que le llegó la gran oportunidad de ser el chef ejecutivo de los Rockets.
Al momento, según contó, en estos pasados cinco meses siempre trabajó en el Toyota Center, pero para la venidera temporada de los Rockets espera que lo incluyan en los viajes para poder cocinar al equipo en las otras ciudades que juegan.