Moscú, 26 de julio de 2021 (EFE) – Rusia contempla establecer una zona franca en las islas Kuriles, cuatro de las cuales son reclamadas por Tokio, según el primer ministro ruso, Mijaíl Mishustin, de visita en el archipiélago, bajo control ruso desde el fin de la Segunda Guerra Mundial.
«Se requieren facilidades importantes para que las personas que aquí trabajan no pierdan el tiempo con la burocracia y se beneficien de un régimen tributario único debido a las complicadas condiciones climáticas del trabajo en las islas», señaló Mishustin, según la agencia RIA Nóvisti.
Rusia está hablando «de la posibilidad de establecer una zona franca aquí», explicó Mishustin, al reunirse este lunes con ejecutivos de empresas pesqueras en Iturup, una de las cuatro islas que reclama Japón.
El Gobierno ruso también estudia desgravar a las empresas que trabajan e invierten en las Kuriles, pero sin convertirlas en un paraíso fiscal.
«No podemos establecer aquí un paraíso fiscal», dijo.
Según Mishustin, sería posible plantearse la eliminación de los impuestos sobre el beneficio, el patrimonio, las tierras, los medios de transporte, así como el IVA en las Kuriles, pero no del impuesto sobre la renta de las personas físicas.
Un régimen económico especial, en opinión del primer ministro, impulsaría la actividad empresarial y podría incentivar el interés de inversores extranjeros, entre ellos Japón.
Cuatro ínsulas del archipiélago de las Kuriles, integrado por 56 islas e islotes, fueron ocupadas por Rusia durante la Segunda Guerra Mundial y están administradas por Moscú desde el final del conflicto en 1945.
El desacuerdo sobre su soberanía es la razón de que aún hoy Japón y Rusia no hayan firmado un tratado de paz tras la contienda.
Tokio reclama la devolución de las islas Iturup, Kunashir, Shikotan y Habomai y confía en recuperar al menos la soberanía de dos de ellas, opción definida en la Declaración Unión Soviética-Japón de 1956, según el Gobierno nipón.
Moscú, por su parte, alega que dicho texto contempla primero la firma del tratado de paz antes de abordar la devolución de dos de las islas más pequeñas del archipiélago, Shikotan y Habomai.
«Rusia estaría interesada en la interacción económica con los países de Extremo Oriente, incluido Japón. Pero hay que entender que no se puede ni hablar de una revisión de los resultados de la Segunda Guerra Mundial», dijo hoy el Mishustin.