Santiago de Chile, 7 de julio de 2021 (EFE) – La ciudad de Rancagua, en el centro de Chile, será el emplazamiento de la única obra del arquitecto Antonio Gaudí (1852-1926) fuera de España, un proyecto que se comenzará a construir este año y que el catalán entregó a Chile como un regalo cuatro años antes de morir.
La voluntad del modernista era replicar una parte de la Sagrada Familia en este país latinoamericano, según consigna una investigación del equipo del arquitecto chileno Christian Matzner, quien en 1995 logró desclasificar unas cartas enviadas entre Gaudí y el fraile chileno Angélico Aranda que lo certificaban.
«Fui a los Archivos Diocesanos del Arzobispado de Barcelona, donde encontramos estas cartas que se intercambiaron ambos. Sacamos copia de ellas y enseguida empezó a funcionar la reactivación de este proyecto», explicó el académico de la Universidad de Chile.
El deseo de Gaudí cobrará forma en Rancagua, una ciudad encajonada entre la cordillera de los Andes y la cordillera de la Costa, 100 kilómetros al sur de Santiago, donde se erigirá la capilla «Nuestra Señora de los Ángeles», basada en su proyecto, que funcionará como centro cultural y espiritual.
En 2016, bajo el mandato de Michelle Bachelet, se confirmó la asignación de fondos públicos y se firmaron los documentos que permitirían oficialmente el inicio de las obras, sin embargo todavía no se ha concretado su construcción que tendrá lugar en un parque urbano que lleva por nombre «Cataluña».
Con 100 metros cuadrados de planta y 30 metros de altura, esta será la única pieza del arquitecto fuera de España y se encuentra a la espera de que se abra una nueva licitación pública para su edificación, que previsiblemente, y si la pandemia de la covid-19 lo permite, comenzará este año.
Matzner ha dedicado gran parte de su vida profesional a este proyecto, que lo ha llevado a Barcelona, a trabajar junto al director de la Sagrada Familia, Jordi Faulí, y a la par con los equipos regionales del Ministerio de Obras Públicas de Chile.
Debido al significado que esta capilla tendrá para el legado histórico de Gaudí, uno de los primeros desafíos fue la necesidad de llevar a cabo un programa formativo para entregar las competencias y herramientas constructivas necesarias para poder llevar a cabo la obra, agregó Alberto Texidó, director de Extensión de la Facultad de Arquitectura de la Universidad de Chile.
«Se nos abre una posibilidad enorme de poder divulgar este conocimiento técnico donde obra, arquitectura, tecnología y artesanía, se mezclan para lograr lo que el arquitecto catalán hizo en otras partes», aseveró.