San Juan, 11 jun (EFE News) – La compañía eléctrica LUMA Energy, encargada desde hace diez días de la transmisión y distribución de electricidad en Puerto Rico, ha señalado este viernes que aún se desconocen las causas por las que se incendió parte de una subestación, cercana a San Juan, que dejó sin luz a unos 900,000 clientes, de los que actualmente hay ahora 19,000 que siguen sin energía, y buscan qué originó el suceso.
Así lo detalló el presidente de LUMA Energy, Wayne Stensby, en una conferencia de prensa en la que estuvo acompañado del director de Proyectos de Operacióón del Sistema de LUMA, Gary Soto; el director ejecutivo de la AEE, Efran Paredes; y el secretario de Seguridad Publica, Alexis Torres, y en la que dijo que esperaba que lo «ocurrido ayer no sea normal».
«Todo los primeros ‘respondedores’, el Cuerpo de Bomberos, la Policía de Puerto Rico, están analizando la situación para evaluar. El FBI también está analizando. Es un poco complejo por la situación de restablecer la luz», indicó Stensby mientras que Torres apuntó que definitivamente, «no puedo descartar nada».
Tras insistir en que el sistema eléctrico de la isla es «muy frágil», indicó que no espera que vuelvan a ocurrir sucesos como el de ayer.
También detalló que espera que para las seis de la tarde hora local (22.00 GMT) se recupere la normalidad, justo 24 horas después de ocurrir el suceso.
Para contribuir a ello se ha instalado en el lugar de los hechos, que las autoridades indican que estaba protegido, una subestación móvil.
LUMA Energy también precisó en la conferencia de prensa que no tiene información de a cuánto ascienden los daños y advirtió de que ya se comunicaron con la compañía aseguradora.
Paredes indicó posteriormente a la conferencia de prensa que considera que la avería fue un accidente.
«A veces los ojos nos engañan, así que hay que esperar al informe final, pero mi impresión de primera intención es que simplemente fue una avería accidental», precisó.
Dado que la isla es un Estado Libre Asociado y territorio de EE.UU., el FBI indicó ayer que evalúa lo ocurrido.
Por su parte, el gobernador de la isla, Pedro Pierluisi, dijo que la prioridad «tiene que ser restablecer el servicio lo antes posible y nuestro pueblo puede estar tranquilo de que estamos asegurando que así sea».
Por su parte, la representante de Puerto Rico en el Congreso estadounidense, Jenniffer González, cree que este hecho, junto a apagones ocurridos en los últimos días, no son actos aislados.
Entre las zonas afectadas por el apagón de ayer están la capital, San Juan, Carolina, Bayamon, Trujillo Alto, Guaynabo, Ríío Grande, Loiza y Cataño, así como sectores de Manatí, Caguas y Canovanas, entre otras.
La última información de LUMA Energy sobre los trabajos de recuperación señala que todavía 19.000 clientes del sistema eléctrico permanecen sin servicio.
De ellos, 13.000 se sirven directamente del transformador dañado ayer por el fuego.
Los trabajos de instalación de la subestación portátil que se transportó a Monacillo para sustituir la instalación afectada ayer por el fuego continúan, según la compañía.
Una vez se termine esa instalación se procederá a reconectar a los 13,000 clientes que se afectaron directamente por el fuego.
La empresa indicó que a hora estimada para completar el restablecimiento del sistema son las 8.00 de la noche lora local (24.00 GMT).
LUMA Energy asumió -por un período de 15 años- el pasado 1 de junio la transmisión y distribución de la energía eléctrica en Puerto Rico, antes en manos de la estatal Autoridad de la Energía Elééctrica (AEE), lo que originó numerosas protestas dado que empleados de la compañía estatal pasaron a la firma comercial debido a los acuerdos con el Ejecutivo y a otras agencias gubernamentales.
En estos once días la isla ha sufrido apagones de diversas índole que han afectado a casi un millón de clientes y varias horas antes del incendio la página web de la compañía había sido objeto de un ciberataque.
Desde la llegada de la nueva empresa, de nueva creación y fruto de la unión de la estadounidense Quanta y la canadiense Atco, una parte de la opinión publica ha mostrado su contrariedad por el cambio de servicio de la AEE a LUMA al esperar un cambio sustancial en un servicio deficitario que ofrecía la AEE.