San Juan (26 de mayo de 2021) – La Coalición Ecuménica e Interreligiosa de Puerto Rico, la Fraternidad Pentecostal de Puerto Rico (FRAPE), el Concilio de Iglesias de Puerto Rico (CIPR) y la Fraternidad de Concilios y Entidades Evangélicas (FRACEEV) del sudeste de los Estados Unidos se unieron todas por primera vez en la historia para enviar una carta al gobernador Pedro Pierluisi expresando sus inquietudes en cuanto al contrato con LUMA Energy y pidiendo espacio para el diálogo respetuoso que amerita este asunto de importancia para el país.
“La Iglesia, como parte esencial de su vocación, tiene el deber de promover la paz, la justicia y la armonía en nuestra sociedad. Reconocemos que las diferencias de criterios sobre los asuntos de interés público son inherentes a la condición humana. Es por ello que consideramos que las discrepancias y objeciones al contrato de LUMA deben ser trabajadas con profunda sensibilidad y apertura, anteponiendo siempre el interés público por encima de cualquier otro interés», reza la carta enviada al Primer Ejecutivo.
«Nuestro llamado, como líderes religiosos, es servir de puente de encuentro al diálogo ponderado y respetuoso que amerita este asunto de importancia capital para el país. Estamos convencidos de que la búsqueda de soluciones acertadas a este problema tiene que estar orientada hacia el bienestar social”, continúa.
Las organizaciones religiosas, que agrupan la totalidad de las iglesias cristianas en la Isla, entienden que las objeciones al contrato de Luma Energy, que han sido expuestas por prestigiosas organizaciones como el Institute for Energy Economics and Financial Analisys, el Centro para la Nueva Economía, el Colegio de Ingenieros y Agrimensores, entre otras, merecen la más cuidadosa atención por el gobierno de Puerto Rico.
Dentro de sus inquietudes destacaron que el contrato no compromete a LUMA a cumplir con la política energética del Gobierno orientada hacia la ampliación de las fuentes de energías renovables; que LUMA no hace inversión ya que toda la inversión saldrá de fondos públicos y que el contrato no garantiza los derechos adquiridos de los trabajadores ni tiene la obligación de hacer aportaciones al plan de retiro de los empleados.
“Nos parece que una de nuestras principales prioridades en la agenda del país debe ser la de reconstruir nuestro sistema eléctrico de forma eficiente y tecnológicamente resiliente. Por ello es imperativo buscar una salida de consenso, que nos ubique en la dirección correcta, con el fin de contar con un sistema de energía eléctrico moderno y eficiente que provea bienestar para nuestro pueblo, tanto en nuestro presente como en el de nuestras futuras generaciones”, añadieron.
“Le reiteramos nuestra disposición para reunirnos con usted y ofrecerle nuestros mejores talentos y capacidades para servir a nuestro pueblo, que es nuestro llamado. Agradeceremos inmensamente su consideración a la solicitud que le hacemos a través de esta comunicación. ¡Muchas gracias y que Dios le bendiga!”, concluyeron.