San Juan (EFEUSA) – El gobierno de Puerto Rico y la Junta de Supervisión Fiscal (JSF) para la isla han llegado a un Acuerdo de Reestructuración con una «porción sustancial» de poseedores de bonos de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE).
El acuerdo es el resultado de negociaciones de buena fe con un grupo de los principales acreedores de la AEE e incluye la participación del Grupo Ad Hoc de bonistas de la AEE y la compañía aseguradora de bonos, Assured Guaranty Corp, informaron en sendos comunicados la JSF y el gobierno.
«La transformación total de nuestro sistema energético es uno de los pilares de la política pública de nuestra Administración. Ya hemos comenzado la privatización de la AEE mediante el proceso de alianzas público privadas. Logramos la aprobación bipartita de un nuevo marco regulatorio y el fortalecimiento del Negociado de Energía. Ahora con este acuerdo damos un monumental paso al proveer para la reestructuración de las deudas y obligaciones de la AEE y salir finalmente de la quiebra», dijo el gobernador, Ricardo Rosselló.
«Como hemos expresado en el pasado, la reestructuración de las deuda de la AEE es crítica para completar nuestra visión de un sector energético centrado en el cliente que promueva la inversión y el desarrollo económico en la Isla», concluyó.
Bajo el Acuerdo, los bonistas intercambiarán sus bonos existentes de la AEE por dos tipos de bonos de titularización (securitization) nuevos.
Los bonos Serie A tendrán aproximadamente 67.5% del valor de los bonos existentes, mientras que los bonos Serie B serán bonos de «crecimiento» que estarán vinculados a la recuperación económica de Puerto Rico.
El repago de los bonos Serie B es contingente en la demanda de electricidad y el repago de los bonos Serie A.
Es posible que los bonos Serie B no reciban ningún repago si la demanda eléctrica es menor a la proyectada en el plan fiscal, y podría pagarse en su totalidad si la demanda eléctrica es superior a la proyectada.
Los términos del Acuerdo también establecen que el repago de los bonos será sufragado con un cargo de transición fijo y sujeto a un máximo predeterminado que no varían con la fluctuación en ventas de la AEE.
Dicho cargo formaría parte de las facturas del cliente, para cubrir el repago de la deuda reducida.
Contrario al acuerdo de restructuración de 2016, el cargo de transición no aumenta si hubiese reducciones en la venta de energía.
«Con la ejecución de este acuerdo, Puerto Rico envía un mensaje poderoso a los mercados de que nuestra isla está tomando los pasos necesarios para reestructurar nuestra deuda pública. Además, le demostramos a Washington y a las posibles contrapartes del proceso de privatización de que tenemos una ruta para que la AEE salga de la quiebra y dejemos atrás el lastre económico de la quiebra,» indicó Christian Sobrino, representante del Gobernador ante la JSF.
La Autoridad de Asesoría Financiera y Agencia Fiscal de Puerto Rico (AAFAF) estima que, durante los próximos diez años, el acuerdo reducirá el servicio de la deuda en aproximadamente $3,000 millones y más de 40% con relación a los términos del acuerdo de reestructuración negociado por la pasada administración en el 2016.
Esta reducción en el costo de servicio de la deuda representa un alivio de aproximadamente $100 anuales, durante los próximos diez años, en la cantidad que el cliente promedio tendría que pagar en su factura para cubrir el costo de la deuda de AEE.
El nuevo cargo bajo el Acuerdo comienza en aproximadamente 1 centavo por kilovatio/hora antes de cerrar la transacción, incrementando a aproximadamente 2.768 centavos kilovatio/hora luego de cerrar y aumentando paulatinamente a aproximadamente 4.552 centavos por kilovatio/hora durante la vigencia de aproximadamente 40 años de los bonos.