San Juan, 25 ago (EFE News) – La comisionada residente Jennifer González dijo que el proyecto de las congresistas Nydia Velázquez y Alexandria Ocasio Cortez de que Puerto Rico haga una «Asamblea Constitucional de Estatus» autorizada por el Congreso se «opone a la igualdad de los puertorriqueños y a nuestro deseo de ser un estado» y la misma supone «vivir en la colonia de permanentemente» y una «falta de respeto».
El proyecto de ley de las representantes de la Ciudad de Nueva York demuestra una vez más «una falta de respeto al pueblo de Puerto Rico y al proceso democrático en el territorio. Pero esta acción no sorprende proviniendo de la mujer que obtuvo los votos necesarios en el Congreso para imponer la antidemocrática Junta de PROMESA sobre el gobierno electo del territorio», dijo.
«¿Cómo es posible que estas congresistas que no viven los problemas que día a día vivimos los que estamos en la colonia, que gozan de todos los privilegios de una ciudadanía americana de primera, nos quieran imponer un proceso totalmente antidemocrático en donde una ínfima minoría de personas deciden por encima del voto directo de la mayoría de los puertorriqueños? Un proceso que nuestro pueblo ha rechazado una y otra vez», indicó.
«Esto no es solamente inaceptable para el pueblo que represento, pero altamente reprochable», remarcó.
«Nuestra gente ha demostrado a través de todos los procesos plebiscitarios que atesoran su ciudadanía americana y su relación permanente con los Estados Unidos. Lamentablemente, mis colegas no quieren para el pueblo que represento lo que ellas disfrutan todos los días, no quieren la estadidad para Puerto Rico», subrayó.
«Lo que pretenden con esta medida en el Congreso es darle más vueltas al asunto y que nuestro pueblo no logre la igualdad que ha reclamado en los procesos del 2012 y 2017», remarcó.
A su vez, se preguntó por qué ellas no favorecen un proceso donde se le permita a «nuestro pueblo que decida Estadidad si o no? La contestación es evidente porque pretenden seguir dejando a nuestra tierra en el coloniaje, sin la igualdad plena de la ciudadanía americana que ambas disfrutan. ¡Basta ya! Nuestro pueblo ha votado ya en la dirección de la igualdad plena, en procesos democráticos en donde todo el electorado pudo participar».
El proyecto de ley que han propuesto «es un intento transparente de ayudar a sus amigos en la isla que se oponen a la igualdad, para socavar e interferir con el voto del pueblo dentro de nueve semanas».
«No necesitamos una improbable negociación federal-territorial para definir otras opciones de estatus que no sean territoriales. Las opciones no territoriales (estadidad, independencia y soberanía con los Estados Unidos que puede ser terminada por cualquiera de las partes), ya están definidas en la Constitución de los Estados Unidos y el derecho internacional, como las administraciones demócratas y republicanas y los comités del Congreso han dicho durante un cuarto de siglo», aseveró.
Por último, dejó claro que no va a delegar «mi derecho, ni el de mi pueblo, a la igualdad plena. Tampoco nuestro derecho a ser ciudadanos americanos en grupos con una agenda claramente separatista. Mucho menos cuando al final del camino es el Congreso el que tiene que decidir y no me queda duda, que decidirán por darle la igualdad de derechos y responsabilidades que siempre ha clamado nuestra gente».