Este proyecto requirió una inversión aproximada de $1.6 millones, que fueron sufragados con el presupuesto operacional de LUMA y requirió coordinación con agencias estatales y federales
San Juan (EFE) – La empresa LUMA Energy anunció este sábado que el transformador de Maunabo fue trasladado a la subestación de Santa Isabel, donde además completó los trabajos en la línea de transmisión 200, fuera de servicio desde el huracán María.
El director de Líneas de la División Central y Sur de LUMA, Alejandro González, informó que en la madrugada de hoy sábado se trasladó «con éxito» el transformador de Maunabo a Santa Isabel.
De no surgir algún contratiempo esperan que esté en funciones a mediados del próximo mes, según González, quien prometió continuar trabajando con «sentido de urgencia» para culminar las labores relacionadas al transformador.
Este traslado llega después de cuatro meses de problemas e inestabilidad energética en los pueblos de Santa Isabel, Coamo y Aibonito, que vieron como el primer transformador destinado a la zona estaba averiado.
Según LUMA, los residentes y comerciantes de Santa Isabel, Coamo y Aibonito experimentarán una mejoría significativa en la estabilidad del servicio eléctrico tras culminar los trabajos en la línea 200, lo que beneficiará a sobre 24.000 clientes del área sur.
Los trabajos tuvieron el objetivo de fortalecer y reconstruir la línea 200, que había estado fuera de servicio desde el paso del huracán María en 2017.
Como parte de las labores se instalaron 54 postes de acero de 70 pies de alto con bases de cemento de 13 pies de profundidad que ofrecen mayor resiliencia y confiablidad al sistema y sobre 50.000 pies de cables en el tramo de la línea que discurre a lo largo de la carretera PR-1 entre Salinas y Santa Isabel.
«Estamos bien contentos de completar con éxito estos trabajos que son parte de la reconstrucción de la red eléctrica que estamos haciendo para la resiliencia del sistema», expresó el ingeniero Hendzon Martínez, director de Líneas de Transmisión de LUMA.
El ingeniero explicó que antes de reparar esta línea de 38 mil voltios (38kv), el servicio solo podía ofrecerse a través de la línea de transmisión 4800 que transcurre directamente desde Cayey, lo que limitaba las opciones para atender cualquier contratiempo.
Este proyecto requirió una inversión aproximada de $1.6 millones, que fueron sufragados con el presupuesto operacional de LUMA y requirió coordinación con agencias estatales y federales para asegurar la preservación de áreas históricas y de vida silvestre en la zona.




