Este tratamiento, mínimamente invasivo y de aplicación periódica, gana popularidad entre médicos y pacientes en Puerto Rico
SAN JUAN, Puerto Rico – La terapia de reemplazo hormonal en forma de pellet se ha consolidado en Puerto Rico como una opción innovadora para quienes enfrentan los efectos del desequilibrio hormonal.
Llegó a la Isla hace más de una década y, desde entonces, ha transformado la vida de miles de pacientes, respaldada por un creciente número de médicos certificados —ginecólogos, urólogos, internistas y otros especialistas— que la recomiendan como una alternativa eficaz y práctica para mejorar el bienestar físico y emocional.
Las hormonas juegan un papel esencial en múltiples funciones del cuerpo: regulan el sueño, el apetito, la energía, el estado de ánimo, el deseo sexual y la temperatura corporal. A partir de los 30 años, es común que los niveles hormonales disminuyan, lo que puede provocar fatiga, insomnio, irritabilidad, pérdida de libido y otros síntomas que afectan la calidad de vida. Para contrarrestarlo, los profesionales de la salud pueden sugerir un tratamiento de reemplazo hormonal, entre cuyas formas destaca el pellet.
El pellet es un pequeño implante —del tamaño de un grano de arroz— elaborado con hormonas bioidénticas, derivadas de fuentes naturales como la soya o el ñame. Estas hormonas, similares a las que produce el cuerpo humano, se liberan de manera continua en el torrente sanguíneo durante un período de 4 a 6 meses. Este sistema evita los altibajos típicos de otros métodos hormonales que requieren aplicaciones diarias o semanales.
El procedimiento para colocar el pellet es sencillo y mínimamente invasivo. Se realiza en el consultorio médico, generalmente en la parte superior del glúteo, y toma apenas unos minutos. Sin embargo, es crucial que el tratamiento sea indicado por un profesional certificado, tras una evaluación médica completa y análisis clínicos personalizados.
Tanto hombres como mujeres pueden beneficiarse de esta terapia. En las mujeres, los síntomas hormonales suelen intensificarse durante la menopausia, mientras que en los hombres los cambios ocurren más gradualmente, en lo que se conoce como andropausia. En ambos casos, la terapia con pellet puede aliviar síntomas como fatiga, insomnio, pérdida de libido, cambios de humor, niebla mental, aumento de peso, pérdida muscular, bochornos o disfunción eréctil.

Entre las principales ventajas del método con pellets se destacan:
- Aplicación periódica (cada 4 a 6 meses), ideal para quienes buscan comodidad
- Liberación hormonal continua y estable, sin fluctuaciones
- Uso de hormonas bioidénticas, que el cuerpo reconoce naturalmente
- Mejora potencial de la energía, el estado de ánimo, el sueño y la vida sexual
Aunque no es un tratamiento adecuado para todos, el pellet puede ser una opción efectiva para muchas personas que buscan recuperar su balance hormonal sin depender de rutinas diarias. Hablar con un médico especializado y certificado es el primer paso para determinar si esta terapia es la adecuada.