Por Némesis Mora
Ey! Boricua
Sobre 600 personas, entre ellos amigos, familiares y colegas de la lucha nacionalista, llegaron este viernes hasta la sede del Colegio de Abogados y Abogadas en Miramar para honrar la vida del último sobreviviente del histórico ataque al Congreso de los Estados Unidos en 1954, Rafael Cancel Miranda.
Para el actor y director de cine, Jacobo Morales, el legado más importante que deja Cancel Miranda a las nuevas generaciones es el profundo compromiso patriótico y humanista que lo caracterizó desde su juventud hasta el día de su muerte.
“Rafael combinaba extraordinariamente bien ese compromiso y devoción a su ideal con el aspecto humanista. Esa sonrisa y ese afecto de él era tan de verdad que caló muy hondo en la gente. Tuve el gran placer de que fuéramos condiscípulos en la escuela. Desde entonces, yo capté ese Rafael trascendente, ese Rafael que ha provocado lo que ha estado ocurriendo aquí hoy que hay tanta gente tan presente y para despedirse del patriota y del amigo. Y esos seres siguen en nuestras conciencia por el resto de nuestras vidas”, dijo Morales durante el velorio de Cancel Miranda.
Por su parte, el artista plástico y expreso político Elizam Escobar, elogió la consistencia de su lucha contra el dominio colonial por parte de los Estados Unidos y su cercanía con la lucha nacionalista y la independencia de Puerto Rico.
“Rafael Cancel Miranda tuvo la despedida que realmente quería”, confesó Escobar luego de despedirse de su amigo y colega.
Mientras tanto, el presidente del Colegio de Abogados, el licenciado Edwin Prado, reconoció la importancia de celebrar la vida del líder nacionalista y aseguró que ha sido una de las actividades más concurridas del gremio.
“Se trata de un día histórico. La importancia del evento es reconocer una persona íntegra que estuvo en condición de entregar su libertad por lo que cree. Puerto Rico necesita personas así en estos momentos tan difíciles. Necesitamos grandes cambios”, dijo Prado.
Cancel Miranda falleció el pasado lunes, a las 9:10 de la noche, a sus 89 años y junto a su viuda, María de los Ángeles Vázquez, y su hijo menor, Rafael Cancel Vázquez.
Las exequias continuaron con un acto en el Ateneo Puertorriqueño, a la entrada del Viejo San Juan de la capital, para concluir con una misa en la Catedral de San Juan oficiada por monseñor Roberto González.
La muerte de Cancel Miranda supone un punto y final a la vida de uno de los cuatro puertorriqueños que el 1 de marzo de 1954, junto a Lolita Lebrón, Irving Flores y Andrés Figueroa, llevaron a cabo el ataque al Congreso de Estados Unidos, acto por el cual fue sentenciado a 84 años de cárcel, de los cuales cumplió 25 años y medio en prisiones federales en los Estados Unidos.
Previo a este encarcelamiento había cumplido dos años y un día de prisión por rehusar inscribirse en el Ejército de los Estados Unidos y participar en la Guerra de Corea.
En 1979, y tras intensas campañas por la excarcelación de los nacionalistas en Puerto Rico, Estados Unidos y otros países, así como un canje de prisioneros propuesto por el entonces presidente cubano, Fidel Castro, el presidente de los Estados Unidos en aquel momento, Jimmy Carter, firmó la conmutación incondicional de las sentencias de los nacionalistas puertorriqueños
Cancel Miranda llevaba en Puerto Rico una vida tranquila pero todavía activa en favor de la independencia de la isla caribeña, donde, tras la muerte de sus compañeros, era considerado un referente de la lucha por la deseada libertad por parte del colectivo nacionalista.
Tras la muerte de Cancel Miranda el relevo lo toma Oscar López Rivera, que en 2017 fue liberado tras cumplir más de tres décadas en prisión por cargos ligados a terrorismo.
López Rivera fue detenido en 1981 y sentenciado a 55 años de cárcel por los cargos de conspiración sediciosa contra el Gobierno de Estados Unidos, uso de la fuerza en robo, transporte de armas y de explosivos con la intención de destruir propiedad gubernamental, y en 2017 salió de prisión una vez que el expresidente Barack Obama le conmutó la sentencia.
Cancel Miranda, nacido en julio de 1930 en el seno de una familia profundamente nacionalista era hijo de Rafael Cancel Rodríguez, empresario y estrecho colaborador del líder nacionalista Pedro Albizu Campos.
Desde muy joven, Cancel Miranda se identificó con los movimientos orientados a luchar por la libertad política de Puerto Rico y la justicia social.
Los actos de adiós a Cancel Miranda continuarán mañana con el transporte del cadáver al municipio de Mayagüez, donde será expuesto en el Museo Casa Grande de esa ciudad de la costa oeste de Puerto Rico.
El domingo el cadáver será conducido a la Catedral de Mayagüez, donde será oficiada una misa por el obispo Álvaro Corrada en la Catedral Nuestra Señora de la Providencia, última parada antes de salir para su destino final del cementerio Vivaldi, donde será enterrado.
Termina así la vida de una persona que dedicó toda su existencia a la lucha independentista por Puerto Rico, un Estado Libre Asociado con Asamblea Legislativa y Constitución propia pero con un autogobierno limitado que deja en manos de Washington áreas como defensa, relaciones diplomáticas, seguridad, fronteras o moneda.
Cancel Miranda destacó en su vida como escritor de diferente temática gracias a sus nueve libros, así como artículos en periódicos y revistas nacionales e internacionales, ensayos de análisis político e historia relacionada con Puerto Rico.
Con información de Agencia EFE