San Juan, 18 mar (EFE News) – Tras poner en marcha las medidas más duras de Estados Unidos y sus territorios con el establecimiento del toque de queda y cierre de comercios para combatir la propagación del nuevo coronavirus, ahora el gobierno de Puerto Rico persigue la posibilidad de suspender el tráfico aéreo tanto doméstico como internacional.
En Puerto Rico, que tiene cinco casos confirmados de Covid-19, los cierres de aeropuertos por razones no aeronáuticas, como en este caso, requieren la autorización de la Agencia Federal de Aviación (FAA, por su sigla en inglés).
No es el caso de los puertos marítimos que si con responsabilidad del gobierno de la isla.
La gobernadora de Puerto Rico, Wanda Vázquez, ha solicitado formalmente al administrador de la FAA, Stephen Marshall, poder tomar medidas para controlar el tráfico aéreo como la suspensión de vuelos domésticos e internacionales por 14 días, a Puerto Rico, a raíz de la emergencia sanitaria mundial.
Además pide una respuesta a la carta que se le remitió el 4 de marzo pasado, en la que se solicitaba redirigir todos los vuelos chárter en tres aeropuertos provenientes de jurisdicciones afectadas por el COVID-19, para poder hacer revisiones por fiebre de forma centralizada.
Otra petición, anunció este miércoles, es que la FAA permita al gobierno local solo permitir las ambulancias aéreas, los vuelos de agencias del orden público y vuelos militares.
CASOS POSITIVOS POR LA LLEGADA DE TURISTAS
«Puerto Rico es una isla. Hasta hace pocos días, no teníamos casos de coronavirus, y ahora, por la llegada de turistas, tanto por barco como por avión, contamos con cinco casos positivos», advierte en su misiva la mandataria.
«No queremos más casos en Puerto Rico, y la única forma de prevenir que lleguen más personas contagiadas con este virus es tomando mayores controles en cuanto a la llegada de viajeros. Necesitamos asistencia del gobierno federal para que nos permita controlar los viajes por avión», destacó la gobernadora.
En el caso de los puertos está prohibida la llegada de embarcaciones.
GUARDIA NACIONAL TOMA LA FIEBRE EN LOS AEROPUERTOS
Ayer martes comenzaron oficialmente las operaciones de la Guardia Nacional de Puerto Rico en el aeropuerto internacional Luis Muñoz Marín con el fin de evitar la propagación del nuevo coronavirus.
La gobernadora detalló que la evaluación de los pasajeros por parte de la Guardia Nacional consiste en un proceso inicial, con un cuestionario relacionado a su estado actual de salud y tomas de temperatura.
Todo pasajero, de tener más de 100.3 grados fahrenheit, será referido inmediatamente a una evaluación médica por parte de personal del Departamento de Salud y de la propia Guardia Nacional para los debidos referidos médicos.
«Hasta el momento, sobre 280 miembros de la Guardia Nacional se encuentran trabajando para proteger al pueblo de Puerto Rico de posibles casos adicionales de COVID-19. Estas operaciones se extenderán hasta los aeropuertos de Aguadilla, Ceiba, Ponce e Isla Grande», sostuvo la gobernadora.
Personal de varias instituciones educativas colabora con la Guardia Nacional en este operativo, como el recinto de Ciencias Médicas de la Universidad de Puerto Rico, la Universidad Central del Caribe de Bayamón y la Escuela San Juan Bautista de Caguas.
La gobernadora también informó que el Departamento de Salud ya recibió 200 kits de pruebas adicionales de la compañía Quest, las cuales formarán parte del inventario del Departamento de Salud para realizar en el aeropuerto a aquellos pasajeros que presenten los síntomas.
«Es importante que el pueblo de Puerto Rico sepa que estamos haciendo absolutamente todo lo que está a nuestro alcance para ejecutar las medidas necesarias para evitar la propagación mayor de este virus. Pero, todas y todos tenemos que poner de nuestra parte. Es esencial que nos mantengamos en nuestras casas, de este modo estamos cuidando de la salud de todos nuestros familiares y conocidos. Reconozco que esto representa un sacrificio, pero valdrá la pena, ya que de ese modo estamos salvando vidas», dijo.