San Juan, 27 jul (EFE News) – La alcaldesa de Ponce, María E. Meléndez, anunció medidas más restrictivas para controlar la propagación del COVID-19, e instituyó el uso obligatorio de mascarilla en todo el municipio de Ponce bajo pena de multa.
Las personas o empresas que incumplan las disposiciones, se enfrentarán a sanciones y multas establecidas en la Ley 20-2017 del Departamento de Salud de hasta $5,000.
«Mi prioridad en este momento es la seguridad de mis empleados, todos los ponceños y ponceñas y de las personas que nos visitan. Los casos positivos de COVID-19 están aumentando de manera alarmante y mi responsabilidad como alcaldesa es salvar vidas. Por eso nos corresponde tomar las medidas que sean necesarias», expuso Meléndez.
De no utilizar mascarilla en toda la extensión territorial de Ponce, se exponen a una pena de cárcel que no excederá los seis meses, una multa que no excederá los $5,000 o ambas penas.
«Lamentablemente tenemos que tomar estas decisiones para proteger vidas. El uso de la mascarilla y el distanciamiento social, hasta el momento, son las prevenciones más importantes que tenemos contra esta amenaza. Es responsabilidad de todos evitar exponernos al virus o exponer a alguien más», sostuvo la alcaldesa.
Para asistir en la función de visitar y orientar a los comerciantes de Ponce en torno a sus operaciones conforme con las órdenes ejecutivas vigentes y además, velar por el cumplimiento de las mismas, Ponce creó un grupo de trabajo con empleados municipales que, en caso de identificar algún incumplimiento por parte del comercio, se encargarán de darles una notificación por escrito a la policía municipal, policía estatal y a la epidemióloga, Karla López de Victoria «para que tomen la acción que corresponda», explicó la Meléndez.
«Sé que estamos viviendo tiempos difíciles y que nuestros comerciantes necesitan de la reapertura económica. Hago un llamado a que todos cumplamos con estas regulaciones y cuando salgamos de nuestras casas utilicemos la mascarilla. Si queremos evitar una multa o la pena de cárcel es necesario su uso. En Ponce los queremos seguros», añadió.