San Juan, 3 abr (EFE News) – El ayudante general de la Guardia Nacional de Puerto Rico, José Reyes, dijo este viernes que para antes del 1 de mayo espera colocar unas 2,500 camas en el Centro de Convenciones de San Juan para atender a personas contagiadas con la COVID-19 o estén en su etapa final de tratamiento.
En entrevista con la emisora Radio Isla 1320, Reyes dijo que esto será posible en un esfuerzo combinado entre el Departamento de Salud, el Negociado de Manejo de Emergencias y Administración e Desastres, el Cuerpo de Ingenieros de Estados Unidos e ingenieros de la Guardia Nacional.
“Esto es para crear espacio, para que aquellos hospitales que puedan llenar su capacidad en pacientes críticos de COVID-19, durante el proceso de recuperación final, podamos moverlos a esta facilidad y crear espacio en los hospitales para personas que tienen condiciones criticas”, explicó Reyes.
Al momento, Reyes dijo que tienen anotados a cuatro o cinco compañías que pueda proveer todo el equipo médico para tratar a los enfermos en la instalación sanjuanera, que también fue utilizada por casi tres meses como centro de operaciones del Gobierno tras la devastación del huracán María en 2017.
Reyes, igualmente, informó que esta nueva sala hospitalaria se sumaría a otras, pero movibles, que la Guardia Nacional ha instalado, específicamente al lado del Centro Médico de Mayagüez, para tratar a pacientes contagiados con el COVID-19.
Dicho hospital movible se levantó el pasado lunes.
La estructura, que es primordialmente un sistema de casas de campaña interconectadas y con aire acondicionado, será habilitada, equipada y manejada por el hospital.
El modelo portátil levantado en Mayagüez tiene capacidad para 150 camas.
Mientras, el personal que trabajará allí dependerá de las necesidades del hospital.
“Todos debemos unirnos al esfuerzo de contener el COVID-19. Estas facilidades son parte de ese esfuerzo. Esperamos que no sea necesario utilizarlas, pero de ser así ya estarán en pie y listas para hacer su función”, abundó.
El general dijo además que la Guardia Nacional también planifica instalar otras salas movibles aledaños al Hospital San Lucas, en Ponce, así como Bayamón y colindantes en un par de hospitales privados en Caguas.
“Seguimos haciendo un análisis según se vaya moviendo la curva de crecimiento de los contagios y lo que nos recomiende el equipo médico”, abundó.
Al momento, sobre 560 miembros de la GNPR han sido movilizados en apoyo a las gestiones del Gobierno y el Departamento de Salud operando desde los cinco aeropuertos de la isla, esto como parte de los esfuerzos para evitar la propagación del COVID-19.
Hasta este viernes, en Puerto Rico se han reportado unas 15 muertes por el virus y unas 378 personas han dado positivo al mismo.