El exlegislador presidió la Cámara durante dos términos y mantuvo activa participación política por más de dos décadas
SAN JUAN – Puerto Rico amaneció este domingo con la noticia del fallecimiento de José Ronaldo “Ronny” Jarabo Álvarez, uno de los más influyentes líderes políticos de las últimas décadas. Jarabo, quien se destacó como presidente de la Cámara de Representantes entre 1985 y 1992, murió a los 85 años tras varias semanas hospitalizado a causa de un tumor cerebral.
El deceso fue confirmado por el presidente del Partido Popular Democrático (PPD), Pablo José Hernández, quien resaltó su “liderazgo brillante, oratoria excepcional y compromiso con el servicio público”.
Nacido el 7 de abril de 1940 en Cayey, Ronny se graduó de Ciencias Políticas y Derecho en la Universidad de Puerto Rico, donde forjó su temprana vocación por la función pública. Desde joven se distinguió por su inteligencia, su verbo claro y su habilidad para el análisis parlamentario. Ingresó a la Cámara de Representantes de Puerto Rico en 1973, cuerpo legislativo al que sirvió durante dos décadas, hasta 1993.
Durante su carrera, fue una figura determinante en el Partido Popular Democrático, alcanzando la presidencia cameral en dos términos consecutivos, de 1985 a 1992. En esa etapa se consolidó como un líder de carácter firme pero dialogante, reconocido por su profundo conocimiento de los procesos legislativos, su capacidad de tender puentes entre partidos rivales y su defensa del principio democrático.
Tras dejar la presidencia de la Cámara, continuó activo como asesor legislativo y participó en iniciativas cívicas y espacios de análisis político. En 2022, la Cámara de Representantes honró su trayectoria al designar con su nombre la terraza oeste del Capitolio, un reconocimiento a su legado institucional y compromiso con el servicio público.
Hace varios días, el presidente del PPD había manifestado públicamente su preocupación por la delicada condición de salud de Ronny. En ese momento, anunció que quedaban sin efecto las sanciones disciplinarias que la colectividad le había impuesto durante el cuatrienio pasado, como un gesto de reconciliación y respeto hacia su trayectoria.

Las reacciones de pesar se multiplicaron rápidamente en la esfera política. El expresidente del Senado y actual senador por acumulación, José Luis Dalmau Santiago, evocó su vínculo personal con Ronny al describirlo como “un segundo padre, quien me brindó mi primera experiencia legislativa”. Dalmau recordó que el expresidente cameral fue un mentor constante, cuyo “consejo, temple y amor por Puerto Rico marcaron profundamente mi vida”.
El presidente del Senado, Thomas Rivera Schatz, también se unió al duelo colectivo al recordar al fenecido líder como “un adversario sagaz, un contendor aguerrido, elegante en el vestir, el trato y el verbo”. “Hombre intelectual y cabal”, agregó Rivera Schatz, quien destacó que Puerto Rico pierde a “un gran amigo y hombre de Estado”.
Por su parte, la representante Lourdes Ramos lo describió como “un hombre íntegro y vertical que amó intensamente esta patria” y que, con su capacidad de construir consensos, demostró que “la estatura patriótica trasciende cualquier diferencia ideológica”.
El alcalde de Jayuya y presidente de la Asociación de Alcaldes, Jorge “Georgie” González Otero, destacó que Ronny fue un “defensor incansable de la democracia y el pensamiento crítico”, un orador capaz de dejar “una huella imborrable” en cada debate legislativo.