Washington, 3 ago (EFE) – La campaña del presidente de EE.UU., Donald Trump, busca golpear al virtual candidato demócrata a la Casa Blanca, Joe Biden, con un anuncio en español en el que compara al exvicepresidente con figuras de la izquierda latinoamericana como Fidel Castro, Hugo Chávez y Nicolás Maduro.
El comercial, de apenas de 34 segundos de duración y promovido por la organización Latinos por Trump, arranca con una intervención en la que Biden asegura que será uno de los presidentes «más progresista» de la historia Estados Unidos.
«¿Progresista?», es la pregunta que se lee sobre otra imagen del aspirante demócrata y que sirve de hilo conductor para la aparición de las figuras de la izquierda latinoamericana, que además se han identificado con el socialismo.
«Nuestros Gobiernos progresistas», se escucha en una intervención de Chávez, quien gobernó Venezuela desde 1998 hasta su muerte en 2013.
Le siguen en la recopilación de intervenciones el desaparecido líder cubano Fidel Castro, el actual presidente de Venezuela, Nicolás Maduro -quien no es reconocido por el Gobierno de Trump-, y el exalcalde de Bogotá Gustavo Petro.
Al final, el aspirante a la nominación demócrata aparece abrazado con el senador progresista Bernie Sanders.
El mensaje advierte que cuando quieren decir socialista, se refieren a: «una revolución socialista en las propias narices de Estados Unidos», según se escucha en un extracto de un discurso vehemente de Castro.
Y la propaganda cierra con la comparación «Progresista=Socialista» escrita sobre una fotografía del breve apretón de manos que Biden y Maduro protagonizaron durante la toma de posesión, en enero de 2015, de la entonces presidenta electa de Brasil, Dilma Rouseff.
En ese entonces, Biden era el segundo a bordo de la Administración del presidente Barack Obama, quien gobernó Estados Unidos entre 2009 y 2017.
En gran parte por su impopular gestión de la crisis de COVID-19, cuya gravedad negaba en un principio,Trump se ha desplomado en las últimas encuestas electorales frente a su rival demócrata.
Los números son especialmente preocupantes para Trump en estados clave que ganó en las elecciones de 2016, como Michigan o Pensilvania e incluso ponen en peligro fortines como Florida, que es el nuevo foco de la pandemia en el país.
Según el recuento independiente de la Universidad Johns Hopkins, 4,69 millones de personas han contraído el coronavirus en Estados Unidos, donde las muertes superan los 150.000 casos.