Nueva York, 3 ene (EFE News) – El alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, aseguró este viernes que se ha coordinado con los mandos de la policía de Nueva York para «estar vigilantes» y proteger localizaciones clave de la ciudad «ante cualquier intento de Irán y sus aliados terroristas de tomar represalias contra Estados Unidos».
En reacción al ataque perpetrado esta madrugada por Estados Unidos y que acabó con la vida de Qasem Soleimani, comandante de la Fuerza Quds de los Guardianes de la Revolución de Irán, el edil neoyorquino auguró que «durante un largo periodo de tiempo» deberán permanecer atentos ante esta «amenaza».
De Blasio, que compareció este mediodía junto a altos cargos de la Policía, recordó que «durante los últimos 20 años, Nueva York ha sufrido los resultados del terrorismo» y advirtió que, desde anoche, «nos enfrentamos a una realidad diferente: estamos en un estado de guerra de facto entre EE.UU. e Irán y nadie sabe qué pasará».
«En las décadas recientes no nos hemos enfrentado a la realidad de una guerra con el Gobierno de un país grande con una red internacional terrorista a su disposición, y no hace falta recordar que Nueva York es el objetivo terrorista número uno en EE.UU.», sostuvo.
«No queremos asumir cosas, pero sabemos que históricamente Irán y sus aliados han estado interesados en las localizaciones de Nueva york más prominentes y conocidas internacionalmente», agregó, señalando que en algunos casos se reforzarán los controles de acceso mediante «revisiones de mochilas».
De Blasio matizó que no quiere ser «alarmista» y expresó su confianza plena en la Policía y las agencias del orden, pero pidió a los ciudadanos estar en «constante vigilancia» y seguir el lema de las autoridades: «Si usted ve algo que le preocupa, diga algo».
El comisario de la Policía de Nueva York, Dermot Shea, aseguró que no existe ninguna amenaza «específica o creíble» contra Nueva York y que las agencias colaboran para detectarlas antes de tiempo, pero se podrá observar mayor presencia de efectivos armados en localizaciones clave.
Por su parte, el subcomisario de la Policía, John Miller, apuntó que Irán es el «principal estado patrocinador del terrorismo» y mencionó casos recientes contra sus aliados en EE.UU., como Ali Kourani, un espía de la organización chií libanesa Hizbulá condenado el pasado diciembre en Nueva York a 40 años de prisión.
El gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo anunció esta tarde que también incrementará la seguridad en infraestructuras a lo largo del estado por precaución y que ha ordenado desplegar miembros de la Guardia Nacional en los aeropuertos de la ciudad.
Asimismo, ha ordenado a las empresas de suministro eléctrico, gas natural, líneas telefónicas y agua corriente que aumenten su vigilancia en cuanto a «seguridad cibernética y física», y el Departamento de Interior está coordinándose con el centro de Inteligencia estatal para «informar de ciberactividad sospechosa».
De Blasio dijo hoy a través de Twitter que está preocupado por su ciudad y por el país, y apuntó que el ataque de Estados Unidos a Irán se ha producido sin el visto bueno de la Cámara de Representantes, donde hay mayoría demócrata.
«Sin la aprobación del Congreso, el gobierno de Estados Unidos le ha declarado la guerra a Irán esta noche. El pueblo estadounidense no ha tenido voz en el asunto», insistió de Blasio, quien agregó que «esto no terminará pronto».