(Tokio, Japón) 1 de agosto de 2021 – “Yo soy puertorriqueña”. Esa fue la consigna para la corredora de 100 metros vallas en el 2016, defendiendo su identidad ante los tribunales sociopolíticos en los que se sumergen cada cuatro años los puertorriqueños con los representantes olímpicos.
Jasmine Camacho Quinn decidió regalarle a su madre María Camacho la elección de representar a Puerto Rico. María es puertorriqueña, nacida y criada en Trujillo Alto. Se desprendió de la tierra, pero no de la Patria, a los nueve años para establecerse en New Jersey. Se ha encargado de que su familia conozca, viva y ame las raíces boricuas.
La hija de María es el reflejo de uno de millones de puertorriqueños en la diáspora de los Estados Unidos. La decisión de Jasmine es el vínculo sanguíneo familiar y cultural con la Isla del Encanto que evidencia su identidad y soberanía deportiva puertorriqueña.
Su primera medalla por Puerto Rico fue ganada en el 2016 durante el Campeonato -23 de la Asociación Atlética de Norteamérica, Centroamérica y el Caribe (NACAC, por sus siglas en inglés).
No existe el espacio para la duda, el reclamo ni la invalidez de la identidad puertorriqueña. A continuación, un recuento de lo que fue cimientos en la pista.
Volaba en la secundaria
La base de sus logros se reflejaba desde la escuela secundaria Fort Dorchester High School de North Charleston. Sus zancadas le dieron el tiempo más rápido de la nación americana 13.33 segundos en el 2014. Con el viento legal que requiere la carrera hizo 13.55 segundos para ser el mejor segundo tiempo de los Estados Unidos.
Además de dominar las vallas, Camacho Quinn ganó cuatro títulos estatales al aire libre en los Campeonatos de Carolina del Sur en el 2013. Además de los 100 metros vallas, Camacho Quinn se coronó en salto de longitud, 100 y 200 metros. Por sus logros recibió el premio a la mejor atleta femenina de pista en la escuela secundaria de The (Charleston) Post and Courier.
Grandes logros en Universidad de Kentucky
La disciplina y la consistencia han sido determinante en la carrera de la vallista. En sus años universitarios dejó grandes huellas en Asociación Nacional Atlética Colegial (NCAA, por sus siglas en inglés).
Entre sus logros se destacan que fue tres veces campeona en los eventos de 100 metros vallas, 2016 y 2018, y en el relevo 4×100 en la temporada de 2017. En la Confederación Sudeste de la NCAA sumó seis campeonatos en: 60 metros vallas (2017-2018), 100 metros vallas (2016-2018), relevo 4×100 metros (2018).
Su prestigiosa carrera universitaria siguió brillando con 12 veces “first Team Alla-America” en: (2016) 100 metros vallas, 200 metros, 4×100 metros; (2017) 60 metros valla, 100 metros vallas, 4×100; (2018) 60 metros vallas, 200 metros, 4×100 metros, y 4×400 metros. En toda la historia de la NCAA posee el segundo mejor récord en los 100 metros vallas con 12.40 segundos.
Su progreso en las vallas ha sido notable
La Mundial de Atletismo (World Athletics) es el archivo histórico de los corredores, saltadores y lanzadores del universo.
Su progreso ha sido paulatino y sostenido como lo reglan los datos: (2011) 15.52 segundos en Summerville, SC; (2013) 13.84 segundos en Hopkins, SC; (2014) 13.37 segundos en Seattle, WA; (2016) 12.69 segundos en Tuscaloosa, AL; (2017) 12.58 segundos en Eugene, OR; (2018) 12.40 segundos en Knoxville, TN; (2019) 12.82 segundos Marieta, GA; (2021) 12.26 en el Estadio Olímpico de Tokio, Japón.
En la prestigiosa Liga Diamante ganó con 12.38 segundos en el evento de Stadio Luigi Ridolfi de Firenze, Italia el pasado 10 de junio.