La gobernadora de Puerto Rico anuncia medidas urgentes para transformar el sistema eléctrico y garantizar un verano sin apagones
San Juan (EFE) – La gobernadora de Puerto Rico, Jenniffer González, enfatizó este jueves que «¡LUMA se va!» ya que «el mayor reto» y el problema «más urgente» del Gobierno es «la situación energética» de la isla, durante su mensaje de la situación de Estado.
«Nuestro pueblo merece una red eléctrica que funcione, que no falle cada vez que llueve», aseveró la mandataria que hizo hincapié en que el Ejecutivo trabaja «con urgencia y con compromiso» para lidiar con este problema.
A su juicio, el Gobierno en menos de 180 días ha alcanzado «avances concretos y medibles» como la creación de un comité de trabajo multisectorial y la figura del Zar de Energía.
Además, González afirmó que incrementó mediante una ley las penalidades por incumplimiento que el Negociado de Energía puede imponer a los operadores privados y la Autoridad de Energía Eléctrica de Puerto Rico.
Por último, firmará cinco órdenes ejecutivas para mejorar el sistema eléctrico.
«Todas estas leyes y órdenes ejecutivas se unen a las más de 10 órdenes ejecutivas y administrativas, del presidente de Estados Unidos y el Departamento de Energía Federal, que permiten que se asegure el flujo continuo de fondos federales para reparar y estabilizar nuestro sistema», zanjó la gobernadora.
Para tranquilizar a la población ante los temores a un verano de apagones, González aseguró que el estado del sistema de generación es «mucho mejor» que el que hubo en los veranos de 2020 a 2024.
Esto se debe a la entrada en servicio de la unidad 5 de San Juan y el ciclo combinado de la Central Aguirre, que aportan una capacidad de generación de aproximadamente 3200 megavatios, que son suficientes para cubrir la demanda actual.
Esto representa aproximadamente 700 megavatios adicionales a la capacidad de generación que existía a principios de este año.
De la misma forma, durante los próximos 2 meses se espera que entren en servicio la unidad 2 de la Central Aguirre con una capacidad de 400 megavatios y la unidad 4 de la Central Palo Seco con 200 megavatios.
«Esto es vital para todos los que vivimos en esta isla, porque permitirá contar con la reserva necesaria, no solo para manejar cualquier imprevisto, sino para implementar un programa adecuado de mantenimiento preventivo de las unidades en servicio para mantener nuestra economía y que tengamos luz», subrayó.




