San Juan, 31 mar (EFE) – El exlegislador de Puerto Rico Nelson Del Valle Colón se declaró este jueves culpable de participar en un esquema de soborno y cohecho, en el que también están implicadas dos empleadas del Capitolio, sede del Legislativo de la isla.
Del Valle Colón, de 56 años, aceptó su culpabilidad de un cargo de soborno del programa federal ante la jueza federal de distrito Silvia Carreño Coll y podría ser condenado a una pena máxima de diez años de cárcel.
Antes esta misma magistrada también se declararon ayer culpables por el mismo cargo las empleadas del Capitolio Mildred Estrada Rojas, de 55 años, y su hija, Nickolle Santos Estrada, de 32, según informó la Fiscalía Federal en un comunicado.
Del Valle Colón fue elegido para ser miembro de la Cámara de Representantes de Puerto Rico en 2016 y, posteriormente, contrató a Estrada y Santos para trabajar en su oficina.
A cambio de su empleo y sus salarios, Estrada y Santos pagaron sobornos quincenales a Del Valle Colón de aproximadamente $500 y $1,300 desde principios de 2017 hasta julio de 2020.
Los pagos solían hacerse en efectivo en un sobre, aunque en alguna ocasión se realizaron mediante la aplicación de transferencia de dinero ATH Móvil.
Está previsto que el exlegislador sea sentenciado el próximo 30 de junio y las dos mujeres un día antes, según el comunicado, que señala que cada uno enfrenta una pena máxima de diez años de prisión.
«Seguiremos procesando a los funcionarios públicos cuya conducta socava la confianza pública en el gobierno», dijo el fiscal federal para el Distrito de Puerto Rico, W. Stephen Muldrow.
Por su parte, Joseph González, agente especial a cargo de la oficina de campo del FBI en San Juan, explicó que las investigaciones de corrupción pública requieren «mucho trabajo y dedicación porque son de naturaleza delicada y compleja».
Numerosos casos de corrupción pública se han destapado en los últimos años en la isla, donde a finales de 2021 fueron detenidos y retirados de sus cargos varios alcaldes.
