La Paz, 23 abr (EFE) – El presidente de Bolivia, Luis Arce, propuso este viernes la creación de la «economía de la Madre Tierra» como alternativa para lucha contra el cambio climático y una mejor distribución de los recursos entre todos los pueblos.
En el foro «Re-encuentro con la Pachamama» Arce citó varios datos sobre el calentamiento global y la pobreza en el mundo y responsabilizó de nuevo a «las fuerzas de occidente y del capitalismo» por hacer «que los seres humanos hayan roto las relaciones de equilibrio con la naturaleza».
Para Arce, la «gravísima» crisis sanitaria es una más entre las «múltiples crisis» como la climática, social, alimentaria que, en su opinión, son producto de un «excesivo sistema del desarrollo capitalista salvaje».
En ese sentido, señaló que los «esfuerzos tienen que estar orientados a fortalecer una economía de la Madre Tierra» para «generar riqueza para distribuirla entre todas y todos».
Con su propuesta, el presidente boliviano busca hacer contra peso a la «solución de los países ricos a la crisis ambiental que se basa en la profundización del capitalismo verde o ecológico (…) para producir riqueza tiene que producir pobreza».
«Tenemos que poner en marcha la solución de los pueblos del Sur (…) una parte importante de la solución pasa por reconocer y aplicar los derechos de la Madre Tierra», concluyó Arce.
El evento contó con la participación de forma telemática de los presidentes de Venezuela, Nicolás Maduro, y de Nicaragua, Daniel Ortega, el canciller de Cuba, Bruno Rodríguez, y de manera presencial del canciller venezolano, Jorge Arreaza, además de varias autoridades bolivianas.
En su intervención, el presidente Maduro dijo que el mandatario de EE.UU., Joe Biden, «ha reposicionado el tema del cambio climático en la agenda mundial. Es una oportunidad que debe ser aprovechada por las fuerzas revolucionarias del mundo, por los movimientos sociales y ecologistas del mundo».
Por su parte, el presidente Ortega afirmó que «la batalla la damos con lo que podemos hacer en nuestros países en función de recuperar un poco de la naturaleza que ha sido depredada, que ha sido destruida».
