Un dispositivo desarrollado por Insu Health Design en Puerto Rico permite conservar medicamentos fríos durante más de 24 horas sin depender de la red eléctrica
SAN JUAN, Puerto Rico — En una isla donde los apagones son frecuentes y muchas personas dependen de medicamentos que requieren refrigeración, un grupo de emprendedores puertorriqueños ha desarrollado una solución pensada desde la urgencia y con conocimiento local.
Se trata de Insu Health Design, una empresa que creó un dispositivo portátil capaz de mantener medicamentos como insulina y medicamentos biológicos a la temperatura requerida por más de 24 horas, sin necesidad de conexión eléctrica continua.
El dispositivo, descrito por sus creadores como una neverita inteligente, cuenta con una batería recargable que puede conectarse al carro, a un enchufe regular o a un pequeño panel solar.
“Este sistema permite que el medicamento viaje contigo o te acompañe durante un apagón, sin comprometer su eficacia”, explicó Doris Candelaria, cofundadora de la empresa.
La innovación fue presentada recientemente durante el foro Innovate to Elevate Health, un evento organizado por Oliver Wyman, Triple-S y JM Surette Advisors que reunió a mujeres líderes del sector salud, tanto locales como internacionales.
Candelaria participó como panelista en la sesión dedicada a innovaciones emergentes desarrolladas en Puerto Rico por mujeres emprendedoras.

La idea del producto surgió tras el huracán María, cuando Candelaria cursaba un seminario de innovación en la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras. “Nos pidieron identificar un problema real”, recordó. “Hablamos con personas que perdieron medicamentos porque no podían mantenerlos fríos. Algunas se enfermaron, otras fallecieron. Supimos que teníamos que hacer algo”.
El equipo fue fundado por Candelaria junto a su pareja, ingeniero con experiencia en diseño industrial, y otro cofundador con trayectoria en ingeniería y project management. “Yo no trabajo la parte técnica, pero dirijo todo lo relacionado con obtención de fondos, redacción de propuestas, networking y comercialización de la tecnología”, explicó. “Ellos manejan el diseño, la ingeniería, los suplidores, la manufactura. Esto es trabajo de equipo”.
El dispositivo utiliza enfriadores termoeléctricos (TECs), un bloque de agua, un sistema de bomba y tubería, y una cámara de vacío con aislamiento térmico avanzado. A diferencia de otros sistemas, este solo se activa entre un 10% y un 15% del tiempo, ya que mantiene la temperatura con eficiencia térmica. También tiene capacidad de calentamiento, lo que lo hace útil para otros medicamentos que requieren temperatura controlada.
Actualmente, el producto no está disponible comercialmente, pero ya cuenta con una patente registrada en el U.S. Patent and Trademark Office. El ensamblaje final se realizará en Mayagüez, y la empresa mantiene una lista de espera activa en su sitio web: www.insuhealthdesign.com.
El dispositivo está diseñado para ser portátil y apto para viajes aéreos, gracias a su tamaño compacto y batería que cumple con las regulaciones TSA compliant. “Queremos que el sistema esté disponible en farmacias, wellness centers, en hogares, en cualquier lugar donde una persona dependa de sus medicamentos”, señaló Candelaria.
Sobre el costo, indicó que el precio estimado del equipo ronda los $500, aunque están trabajando en alianzas para reducirlo: “Estamos explorando colaboraciones con planes médicos, médicos, farmacias y subvenciones para que esté al alcance de más personas. Esto no puede ser un lujo”.
Candelaria es comunicadora de formación, con un bachillerato en Relaciones Públicas y Publicidad y una segunda concentración en Periodismo. Actualmente se desempeña como coordinadora de proyectos en el Centro de Innovación de la UPR, donde promueve alianzas entre la academia, la industria y el empresarismo. Su enfoque está en conseguir recursos, establecer vínculos estratégicos y comercializar tecnologías con impacto social.

La necesidad de este tipo de solución se hizo evidente una vez más tras el apagón de esta semana que dejó a todo Puerto Rico sin electricidad. Según el Departamento de Salud, más de 400,000 personas viven con diabetes en la isla, muchas de ellas dependientes de medicamentos como la insulina, que requieren conservación en frío constante.
“Perder un medicamento como la insulina puede costar miles de dólares”, advirtió Candelaria. “Pero también puede costarte la salud. Y a veces, la vida. Nuestro sistema fue diseñado para que eso no vuelva a pasar”.
A las emprendedoras que enfrentan el reto de desarrollar soluciones locales, les dejó un consejo claro: “Innovar es más fácil que emprender. La idea llega. Lo difícil es ejecutarla, sostenerla. Se necesita disciplina, consistencia, paciencia y, sobre todo, equipo. Habrá días buenos y días difíciles, pero hay que levantarse y seguir con la meta clara de ayudar a los demás”.
Más información o registro en lista de espera:
🌐 www.insuhealthdesign.com