Operativos en las marinas Puerto del Rey y Sun Bay detectan múltiples violaciones a la Ley de Navegación
SAN JUAN (EFE) – El secretario del Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA), Waldemar Quiles, informó este domingo que la Unidad Marítima de Ceiba del Cuerpo de Vigilantes expidió multas ascendentes a $28,600 a varias embarcaciones en dos marinas de Fajardo por diversas violaciones.
En un comunicado, Quiles explicó que los funcionarios llevaron a cabo estos operativos el 15, 16 y 17 de julio pasados en las marinas Puerto del Rey y Sun Bay, donde se inspeccionaron un total de 75 embarcaciones.
«La navegación segura en la isla es una de nuestras prioridades. Por eso, hemos ejecutado un plan de trabajo dirigido a la verificación de toda embarcación que navegue por nuestras aguas y el operativo de esta semana fue parte esencial de esa labor», destacó
Las multas fueron por violaciones a la Ley 430-2000 (Ley de Navegación y Seguridad Acuática de Puerto Rico) y el Reglamento Núm 6979 (Reglamento para la Inscripción, Navegación y Seguridad Acuática en Puerto Rico).
Entre las violaciones más comunes se identificaron embarcaciones con marbetes vencidos, lo cual infringe el Artículo 9.5 de la Ley 430, que establece la renovación anual del derecho de las embarcaciones. Según dispone la ley, la multa por esta violación es cuatro veces el derecho anual de la embarcación.
En la Marina Puerto del Rey se expidieron 14 boletos por $13,800 por violentar el Artículo 9.5 de la Ley 430-2000 para un total de $13,800, mientras que en la Marina Sun Bay se emitieron 19 multas por $14,800 por violentar el Artículo 9.5 de la Ley 430.
Incluso, durante el operativo del 17 de julio, los vigilantes intervinieron con una compañía que operaba un tour de kayak sin la debida autorización del DRNA en el área de Las Croabas por usar bienes de dominio público sin concesión ni permiso conforme al Reglamento Número 4860.
En esta intervención se decomisaron 4 kayaks para investigación, se intervino con siete personas en la actividad, y se identificó al guía y propietario, quien enfrenta posibles cargos por operar ilegalmente en aguas públicas y en violación a las normas establecidas.
«Los dueños de embarcaciones tienen la obligación de mantener sus marbetes al día, y toda operación comercial en nuestros cuerpos de agua debe contar con los permisos correspondientes. Proteger nuestros recursos naturales es responsabilidad de todos», sostuvo Quiles.




