En un esfuerzo por promover la inclusión tecnológica y financiera de las mujeres empresarias en Puerto Rico, la Cámara de Comercio de Puerto Rico (CCPR) y su Red de Empresarias y Mujeres Profesionales organizaron hoy el Enterprise Women Forum.
Este evento ha sido diseñado para brindar acceso a herramientas y conocimientos esenciales, como la inteligencia artificial (IA) y las redes sociales, que pueden transformar los negocios liderados por mujeres al proporcionarles un mayor acceso a fuentes de capital.
El presidente de la CCPR, Lcdo. Ramón Pérez Blanco, manifestó su satisfacción por la acogida del evento, reiterando el compromiso de la cámara para fortalecer las operaciones de negocios femeninos.
Anamaria Cagua, investigadora en ciberseguridad e inteligencia artificial, destacó el potencial revolucionario de la IA en la creación y consumo de contenido, ofreciendo a las empresarias la posibilidad de generar comunicaciones alineadas con los valores y mensajes de sus marcas, optimizando así tiempo y recursos.
Por su parte, la CPA María Virella Báez, presidenta de WorldNet Telecommunications, enfatizó en la automatización de procesos y la mejora de la experiencia del cliente como ejemplos clave de cómo la tecnología puede aplicarse en el ámbito empresarial. Desde aplicaciones móviles hasta sistemas de atención basados en IA, las posibilidades son vastas para quienes buscan eficiencia y un servicio al cliente excepcional.
La Lcda. Margaret Ramírez Báez, líder de la Red de Empresarias y Mujeres Profesionales, abordó la importancia del acceso y uso adecuado del capital.
Refiriéndose a estudios que muestran una brecha significativa en la inversión entre negocios liderados por hombres y mujeres, señaló que equiparar las oportunidades de acceso a capital no solo beneficiaría a las empresarias sino que también podría tener un impacto substancial en el PIB mundial.
El evento resaltó datos de un análisis de la firma BCG, que revela que, aunque las empresas lideradas por mujeres reciben menos inversión inicial, estas tienden a ser más rentables a largo plazo, generando un 10% más de ingresos acumulados en cinco años en comparación con las fundadas por hombres.
Este hallazgo subraya la necesidad de un cambio en la percepción y el apoyo financiero hacia los negocios dirigidos por mujeres, proponiendo un potencial crecimiento económico global significativo si se equilibra el acceso al capital.
