Bogotá, 21 mar (EFE) – Turismo rural, aviturismo, biciturismo, senderismo y turismo de bienestar, son los principales frentes en los que trabajará el Instituto Distrital de Turismo (IDT) para atraer visitantes extranjeros a Bogotá y con ello dinamizar la economía afectada por la pandemia del coronavirus.
Una investigación realizada por la firma inglesa Euromonitor International indicó que durante la pandemia los turistas del mundo preferirán experiencias locales auténticas (52%), sostenibles (34%) y con inmersión natural (29%).
Según la agencia de viajes en línea Kayac, que analizó las tendencias viajeras para 2021 en Colombia, los destinos de playa y naturaleza se perfilan como los más buscados, sobre todo al interior del país.
El subdirector de Gestión del Destino del IDT, Andrés Clavijo, ha señalado que esta coyuntura ha permitido robustecer sus acciones en destinos naturales de Bogotá-Región por lo que se trabajará en las cinco áreas.
CAPACITACIÓN PARA FORTALECER LA OFERTA
Con respecto al turismo rural se capacitará a las comunidades locales para que fortalezcan su oferta y formalicen sus emprendimientos.
El IDT hace causa común con el Fondo Nacional de Turismo (Fontur) para capacitar 40 emprendimientos liderados por mujeres, cerrar la brecha salarial con los hombres y lograr que el turismo se convierta en una opción de desarrollo en localidades de la ciudad como Ciudad Bolívar, Usme y Santa Fe.
«No queremos cambiar la actividad económica de los habitantes locales; La propuesta es que el turismo complemente su actividad principal que es la agricultura», aseguró el subdirector de Promoción y Mercadeo del IDT, José Lamar.
El funcionario explicó que la atención está centrada en las fincas y granjas agroturísticas. «Allí los campesinos muestran sus actividades diarias, cuentan su historia y los turistas hacen parte de la experiencia ayudando en la cosecha y ordeñando. Esas experiencias son muy gratificantes y se desean mucho en mercados como Canadá y Estados Unidos».
PARA DELEITAR LA VISTA Y PEDALEAR
Para el aviturismo, el IDT inauguró dos observatorios, uno de ellos un sendero peatonal en el cerro de Monserrate en donde se pueden apreciar especies de colibríes y otras aves.
Estas nuevas infraestructuras hacen parte de la Red de Observatorios de Aves y se sumarán a otros cuatro existentes en la capital. Bogotá es la capital con mayor diversidad de aves en el mundo con 250 especies.
La Red se ha convertido en un gran atractivo para los turistas, provenientes especialmente de Inglaterra y Estados Unidos. En promedio, antes de la pandemia, unos 17,500 turistas internacionales especializados en observación de aves visitaban la ciudad anualmente.
En cuanto al biciturismo, la apuesta radica en dar a conocer el circuito BiciBogotá Región, que tiene 300 kilómetros de ruta en donde los ciclistas podrán conocer 42 atractivos turísticos.
Bogotá también cuenta con el proyecto BiciRegión, recorrido que tiene nueve rutas, que une la región central del país conformada por los departamentos de Boyacá, Meta, Tolima y Cundinamarca.
Los trayectos brindan la oportunidad de conocer lugares históricos como la casa del escritor Jorge Isaacs, autor de la novela romántica «María», cuya primera edición data de 1867.
También se pueden visitar embalses, minas de carbón y observatorios astronómicos con lo que los turistas pueden combinar el deporte y la gastronomía local.
Para el senderismo se plantea fortalecer la infraestructura de caminos ancestrales, en tanto que para el turismo de bienestar se diseñarán experiencias al aire libre para aliviar la salud mental de los residentes y turistas.
